Súmate a nuestro canal en: WhatsApp
Corporación Clarita de Larminat, 25 años al servicio de la salud mental:
Foto: Corporación Clarita de Larminat

Corporación Clarita de Larminat, 25 años al servicio de la salud mental: "Necesitamos que nos enseñen a usar la ley de donaciones"

Por: Natalia Riquelme Campos | 30.10.2025
Adultos mayores que se juntan, tejen, hacen sus cumpleaños, hacen gimnasia para una vejez armónica. En paralelo, las terapeutas ocupacionales hacen terapias cognitivas, de memoria, les leen cuentos. Además, hay programas. Esto, entre otras cosas, es a lo que se dedican en Clarita de Larminat, pero tienen un problema fundamental: el financiamiento.

Patologías psiquiátricas no severas, adultos mayores, adicciones. Ese es el perfil de los casi 100 pacientes que semanalmente recibe la Corporación Clarita de Larminat desde 2001 en La Granja, liderada por su representante legal y con el apoyo de 22 voluntarios y profesionales entre psicólogos, orientadores familiares, terapeutas ocupacionales y monitores de prevención.

Y es que Ericka Fuentealba (78) siente una profunda pasión por el servicio especialmente después de conocer a una religiosa con el mismo nombre de su organización: Clarita de Larminat. "Yo me propuse, cuando conocí a Clarita, acompañar a personas que yo veía sufrir más o menos lo que yo había sufrido".

"No quería ver a personas en ese escenario que yo estuve, que fue muy doloroso, muy precario, muy vejador, todo lo que uno pueda imaginarse en sufrimiento en una persona pequeña, desde años", planteó la técnico en enfermería que además debió especializarse en rehabilitación de drogas para poder continuar con su labor.

"Me tuve que preparar académicamente después del año 2000, cuando aparecen otras drogas. Yo para trabajar en el área de adicciones tuve que especializarme en drogas (...) Nosotros partimos solamente con droga durante unos seis años, y después ya ampliamos. Vimos que había que trabajar con la familia, y ahora es salud mental en genérico", especificó.

[Te puede interesar] La Minuta En Vivo: ¿Kaiser a segunda vuelta contra Jara? con director de Feedback y prevención de drogas con Corporación La Esperanza

El legado de una religiosa con pasión por servir

Pero el paso de la monjita por este plano fue corto, puesto que falleció en 1982. Eso sí, su persona marcó para siempre a Ericka. "El Señor me la puso en el camino cuando yo tenía como 23 o 24 años (...) Ella captaba mamás maltratadas como yo, y nos agarraba y nos enseñaba cosas, y nos preparaba, y después nos hacía que ayudáramos a otros vecinos. Así formó una cadena de colaboradores".

"Cuando ella fallece, yo me quedé en pena como un año de llorar y de no querer nada, hasta que aparece el doctor Andrés Gumucio, que es un psiquiatra muy importante, que conoció a Clarita, trabajó con ella", detalla con visible conmoción rememorando una historia llena de emociones.

Así, cuenta que trabajó con él 10 años en la clínica Santa Sofía de Las Condes, enfrente de la Escuela Militar. Aquella fue la primera clínica psiquiátrica de renombre que hubo en el barrio alto. Allí, asegura, todas las personas que llegaban tenían sobreconsumo de alguna sustancia, alcohol u otros.

Sin embargo, a pesar de todas las buenas intenciones ejecutadas por cientos de personas que sin esperar nada a cambio impulsan esta noble misión, el financiamiento ha resultado un problema para poder seguir llevando a cabo el trabajo comunitario y de reinserción.

[Te puede interesar] Eduardo Artés, candidato presidencial: "Solo un gobierno soberano puede hacer que los BRICS sean favorables para Chile"

Un trabajo trascendental en los hombros de una sola mujer

"Yo hago de todo. Hasta antes de la pandemia siempre he tenido alguna persona que nos colabora y conseguimos recursos para pagarle a alguien en el área administrativa, pero yo hago desde ser la representante legal hasta la limpieza. Muchas veces me quedé de cuidadora acá porque había que cuidar porque nos robaban. Ahora ya tenemos una alarma", comenta.

En esa línea, la sra. Fuentealba hace las compras, las entrevistas para derivar y todo lo demás. "Soy cuidadora, aseadora, limpio patio, limpio los baños, limpio todo. Si hay que preparar comida los días miércoles, que trabajamos todo el día, preparo comida. Si hay que ir a buscar plata, voy a donde la gente que conozco".

Aunque recientemente se adjudicaron un fondo, siguen teniendo problemas para conseguir recursos con el objeto de seguir funcionando. "Estamos inscritos en la ley de donaciones. Tenemos el libreto, tenemos todo ese trámite hecho. Pero por falta de alguien que nos ayude en el área administrativa, no hemos podido echar a andar eso", dice con lamento.

"Ahora hay tres personas en el área administrativa a las que yo quisiera que alguien las preparara para ver cómo nos presentamos en una empresa y qué le tenemos que decir para que nos donen, y si el certificado se llena como se llenaba antes, escrito, o hay que hacerlo digitalmente. No tenemos idea porque hace mucho que no lo usamos", señaló.

[Te puede interesar] Antesala Parlamentaria: José Carlos Meza, diputado por el Distrito 9

El apoyo de un candidato a diputado y la necesidad de flexibilizar la ley

Consultada sobre el apoyo que autoridades y personalidades de la política les han brindado, la presidenta de Clarita de Larminat dijo que han sido pocos y que hay un decálogo donde se establece que no se puede mezclar el servicio con política ni la religión.

Con todo, ella destaca a uno: "Esta vez no sé qué me pasó con el señor José Pepe Toro, algo me ocurrió, de verdad, porque es la primera vez (...) Yo he rezado mucho para que la gente le escuche, para que le vaya bien, porque quiero que le vaya bien".

"Le dije si nos podía colaborar con alguien que nos enseñe, porque queremos usar eso, pero no sabemos. Necesitamos que alguien nos ponga al día de cómo uno se presenta a un empresario, porque por acá hay hartas miniempresas. Gente que se atiende acá y dice: yo trabajo en los Calugas Pelayo, yo trabajo en la moblería tanto. Podemos ir donde esos señores de repente, pero yo no sé cómo presentarme", indica.

Por lo mismo, el ahora candidato por parte del PPD por el mismo distrito en donde se encuentra ubicado el centro, el D10, busca posicionar la flexibilización de la ley de donaciones como algo necesario para que estas y otras iniciativas puedan prosperar para aportar a la sociedad y ayudar a los demás.

Recursos para continuar la senda

"El doctor Gumucio me dice: la Erika saca la plata del bolsillo de la vecina de la casa A, y la pone en el bolsillo de la casa B. Es decir, nos reciclamos los mismos pesos nosotros mismos. Los voluntarios sí vienen de otros lados, gracias al Señor tenemos muchos psicólogos, siete psicólogos, todos voluntarios", planteó.

Ericka cuenta que necesita postular a estos recursos, "porque es legítimo que a un par de cabros que están recién egresados y que no les van a dar trabajo en ningúnn lado -porque les piden dos años de experiencia- les tengamos un tiempo como voluntarios, pero a mí me gustaría conseguirles alguna platita, porque son chiquillos que tienen que vivir, tienen que comer y vestirse".

"Hay gente que colabora, vecinos que colaboran, pero no quieren tomar cargos. Si me toca asumir de nuevo, yo lo hago con el mayor agrado, pero a esta altura ya quisiera que hubiera alguien que pudiera tomar esto, porque tengo 78 años y el día de mañana ya no podré", afirmó.