
La hormona del estrés: 6 claves para reducir de forma natural el cortisol y evitar insomnio, ansiedad e hipertensión
En un entorno cada vez más acelerado, los llamados a identificar y manejar adecuadamente el estrés se vuelven urgentes debido a que niveles altos en le cuerpo impactan negativamente en la salud integral de las personas.
El cortisol, conocido popularmente como la “hormona del estrés”, es producido por las glándulas suprarrenales y participa en funciones vitales como el control del metabolismo, el sueño y la inflamación.
¿Cómo impacta el cortisol en la salud?
Cuando el cuerpo detecta una amenaza -ya sea real o percibida-, activa un sistema de defensa que incluye la liberación de esta hormona para mejorar el enfoque y disponer de más energía.
“Un poco de estrés puede ser bueno”, dice Alfredo Parra, médico internista del Departamento Cardiovascular del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.
Sin embargo, si la activación se mantiene por tiempos prolongados, puede generar consecuencias negativas para la salud, explica.
Esta sobreexposición puede derivar en afecciones como insomnio, ansiedad, hipertensión, trastornos digestivos e incluso depresión.
Frente a estos problemas, se desaconseja firmemente la automedicación o el uso de suplementos sin la guía de un profesional de la salud.
Para ello, es fundamental adquirir herramientas que permitan gestionar las presiones cotidianas sin que estas se traduzcan en un impacto negativo persistente.
¿Cómo reducir el estrés sin medicamentos?
En primer lugar, es clave cuidar la alimentación y mantenerse activo. Una dieta equilibrada y ejercicio regular fortalecen la capacidad del cuerpo para enfrentar tensiones.
Es importante priorizar el descanso. En ese sentido dormir lo suficiente permite la recuperación del sistema nervioso y mantiene en equilibrio las hormonas del estrés.
En tercer lugar, se recomienda practicar técnicas de relajación como la meditación, yoga o ejercicios de respiración profunda.
El médico Parra sugiere practicar la respiración diafragmática la cual consiste en sentarse cómodamente y poner una mano en el pecho y otra en el abdomen, para luego respirar profundo por la nariz.
Se debe "sentir como se hincha el abdomen y no el pecho durante cuatro segundos, aguantar el aire cuatro segundos y luego soltarlo lentamente por la boca durante 6 a 8 segundos. Esto se debe repetir unas 5 a 10 veces y eso va a tratar de calmar el sistema nervioso”, indica.
El entorno también juega un rol activo, por eso se debe fomentar los vínculos sociales. Estos es, conversar con personas de confianza o participar en grupos de apoyo.
En quinto lugar, es importante evitar hábitos nocivos como el consumo excesivo de alcohol, tabaco, comida o uso extremo de redes sociales.
Finalmente, se debe consultar con profesionales, quienes ofrecerán estrategias personalizadas para afrontar el estrés de manera más efectiva.