
Vibraciones en casas y ruido hasta la noche: Vecinos convivieron 5 años con helipuerto irregular de ex ministros de Piñera
En 2019 vecinos de tres poblaciones de Huechuraba comenzaron a sentir ruidos fuertes frecuentemente muy cerca de sus casas, sin saber a qué se debían. Empezaron a averiguar y se enteraron de que se había instalado un helipuerto a 300 metros de las poblaciones, en una zona donde el Plan Regulador Comunal no permite ese tipo de instalación. Los vuelos llegaban de a varios por día, incluso hasta las 2 de la mañana y hacían vibrar las ventanas de las casas.
Desde entonces, la comunidad inició una batalla legal que este 23 de abril rindió sus frutos más concretos, cuando la Corte Suprema declaró que el permiso de edificación con el que el helipuerto extendió su operación por tres años, es ilegal. Sin permiso de edificación, el helipuerto no puede operar y deberá ser desarmado.
Así, culmina un negocio cuya propiedad está ligada a los empresarios Juan Riesco Alegría y Alejandro Simonetti, y a los ex ministros del gobierno de Sebastián Piñera, José Félix de Vicente y Alfredo Moreno. Este último acaba de ser asignado como parte del directorio de Codelco. Ante el resultado de la causa, De Vicente criticó el Plan Regulador y confirmó que no perseverará con la iniciativa.
Vecinos del helipuerto
Habitantes de las poblaciones El Barrero y el Bosque 1 y 2 buscaron apoyo legal en la clínica jurídica ambiental de la Universidad Diego Portales y con ayuda de los estudiantes ganaron el caso, celebrando el fallo incluso con sorpresa.
“Estoy emocionada porque no estamos acostumbrados a ver que se haga justicia a favor de los débiles o pobladores con menos recursos. Este proyecto era un riesgo inminente y no se habría instalado en un sector acomodado. Hay una forma de discriminación, de que el pueblo se va a quedar callado y va a aceptar algo incluso si daña completamente su calidad de vida. Nosotros, organizados pudimos lograrlo”, declara Nancy Huenul, presidenta de una de las Juntas de Vecinos del Sector.
Maximiliano Bazán, dirigente del Movimiento Solidario Vida Digna de Huechuraba y uno de los que lideraron la batalla legal, comenta que los fuertes ruidos constantes y el paso de los helicópteros a muy baja altura hasta la noche, incluso gatillaron crisis en personas de la zona con Trastorno del Espectro Autista.
También menciona el temor constante de que se accidentara algún helicóptero y cayera sobre sus poblaciones, y el hecho de que en el recinto se acopian cerca de 70 mil litros de diésel. Los vecinos comentan que accedieron a los registros de vuelo y que un porcentaje menor al 1% de ellos eran destinados para fines públicos.
“Los cinco años en que operó el helipuerto fueron tortuosos para todos y sobre todo para adultos mayores y vecinos con TEA. Hicimos mediciones y los decibeles estaban muy por sobre los límites permitidos. Así detectamos que se estaba vulnerando el Plan Regulador y las normas de ruido, y que los permisos provisorios se extendieron más de la cuenta y eso lo vivimos con desdicha. Pensamos que este era un mal vecino que íbamos a tener siempre, y logramos este fallo gracias a la organización de los pobladores”, relata Ricardo Carter, poblador de El Bosque 1.
El alcalde de Huechuraba, Maximiliano Luksic, que ya había clausurado el helipuerto cuando ingresó a su cargo, anunció el inicio de un sumario interno por las irregularidades ocurridas en la administración anterior.