Súmate a nuestro canal en: WhatsApp
¿EE.UU. terminó con la globalización?
Foto oficial de La Casa Blanca

¿EE.UU. terminó con la globalización?

Por: Francisco Díaz Hermelo | 05.04.2025
Los aranceles encarecen los productos, reducen la eficiencia económica y generan inflación. A largo plazo, las políticas proteccionistas generalizadas rara vez han logrado desarrollar industrias competitivas. Ejemplos recientes en Mercosur e India muestran que estos esquemas suelen proteger sectores ineficientes, sin impulsar la innovación ni el crecimiento sostenible.

Tomó décadas construir las complejas redes de producción y comercio mundial, y ni siquiera el presidente Trump y los arquitectos de esta nueva política comercial de EE.UU., pueden prever con certeza todos sus efectos.

[Te puede interesar] Presidente Boric sigue en su viaje en la India: Buscará oportunidades de colaboración e inversión tecnológica

Analicemos qué podría suceder con Chile. En principio, hay efectos directos positivos. Los aranceles del 10% están entre los más bajos, lo que nos da una ventaja relativa frente a otros exportadores con tasas más elevadas. Además, esta ventaja impositiva no implica que los estadounidenses puedan sustituir las exportaciones chilenas, como el cobre, el vino, las frutas y productos de la madera.

Otro punto a considerar es que gran parte de América Latina ha sido "beneficiada" con aranceles menores en comparación con Asia y Europa. Esto los podría acercar aún más a Chile y la región, en busca de nuevas alianzas y mercados alternativos.

Lo más difícil de anticipar, y quizás lo más perjudicial, son los efectos indirectos. Los aranceles impactan fuertemente a nuestros principales socios comerciales, como China y la Unión Europea. Si ellos responden con medidas equivalentes, podríamos ver una escalada y la reconfiguración de las alianzas comerciales.

[Te puede interesar] Cultura congelada en Congreso: Solo 2 de 101 proyectos culturales se convirtieron en ley durante último año

La mejor estrategia para Chile es estar atento, evitar conflictos y aprovechar las oportunidades de este nuevo orden comercial, mientras se amortiguan los efectos negativos. Esto implica recuperar el crecimiento y mejorar la productividad.

Si bien el desenlace de este giro proteccionista es incierto, lo único seguro es que el 2 de abril de 2025 quedó marcado como un punto de inflexión en el comercio global.

Así como los principales beneficiarios de los bajos aranceles y los paraísos fiscales fueron, en realidad, los consumidores y empresas estadounidenses que disfrutaron de precios reducidos e impuestos bajos, los grandes perjudicados por esta nueva política serán los consumidores de clase media.

[Te puede interesar] “No nos sentimos responsables”: Presidenta FA se desmarca ante destitución de senadora Allende

Los aranceles encarecen los productos, reducen la eficiencia económica y generan inflación. A largo plazo, las políticas proteccionistas generalizadas rara vez han logrado desarrollar industrias competitivas. Ejemplos recientes en Mercosur e India muestran que estos esquemas suelen proteger sectores ineficientes, sin impulsar la innovación ni el crecimiento sostenible.