“Se despacha la reforma de pensiones a ley”, fueron las palabras que pronunció ayer la presidenta de la Cámara de Diputados, Karol Cariola, una vez concluída una intensa ronda de votación de indicaciones. Apenas se escucharon las palabras de la diputada, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, y su par de Hacienda, Mario Marcel, se levantaron de sus asientos en la testera y se fundieron en un largo abrazo.

La emoción de los ministros se explica en lo extensa y dura que fue la negociación para sacar adelante la reforma. Sólo en este gobierno, la discusión se extendió por dos años y un mes. Y en el debate público, la intención de reformar el sistema estuvo presente en dos gobiernos —el de Michelle Bachelet (2014) y Sebastian Piñera (2018)— sin tener éxito. 

Por lo mismo, la aprobación de la reforma trae consigo un subtexto que en el oficialismo buscan explotar: este es el gran legado del Presidente Gabriel Boric.

Desde que el gobierno entró en su último tramo de gestión, se ha instalado la discusión sobre cuál será el legado del mandatario frenteamplista. Y en la alianza gobierno no han dejado pasar la oportunidad de destacar que el alza de las jubilaciones es un logro del actual mandatario. 

“Esta reforma de pensiones no solo va a ser parte del legado de este gobierno, sino que va a ser el legado más importante que va a dejar el gobierno del Presidente Boric. Es una iniciativa del Ejecutivo que avanza en función de un acuerdo con una parte importante de la oposición, y que va a mejorar las condiciones en las cuales se jubilan los chilenos y chilenas, los actuales y los futuros. Es un cambio de paradigma. Se cambia el modelo y el sistema de AFP tal cual lo conocemos y se da paso a un sistema mixto, con más solidaridad, con seguro social, rescatando también lo bueno de lo actual, pero mejorándolo y cambiándolo en función de la experiencia internacional”, dijo por ejemplo ayer miércoles el diputado Raúl Soto (PPD) antes de que se concretara la votación. 

Misma opinión expresó la jefa de bancada de Independientes-PPD, Camila Musante, quien señaló que “sin lugar a dudas la reforma sí constituye una parte importante del legado del Presidente Boric”.

Consultado por El Desconcierto, el jefe de bancada del Frente Amplio, Jaime Sáez, asegura que efectivamente esta es “la reforma más importante aprobada en este periodo, sobre todo dadas las condiciones de adversidad en ambas Cámaras. Considerando esa situación, desde mi punto de vista, constituye la reforma más relevante aprobada durante este periodo presidencial”.

Respecto a la importancia de la reforma para el legado del Presidente, el parlamentario frenteamplista se muestra cauto sobre calificar este triunfo como el “gran legado” del Presidente Boric, como lo han catalogado otros personeros de la alianza oficialista: “Me parece que está por verse si es que la reforma será el gran legado del gobierno. Sin duda es una parte importante, pero hay otras cuestiones también relevantes como Copago Cero, la creación de Afide, entre otras medidas. Pero sí, creo que esta reforma forma parte sustancial del legado de esta administración”.

Un problema menos para Matthei

Para la derecha, particularmente Chile Vamos, el saldo que dejó la aprobación de la reforma de pensiones es más bien positivo. Si bien los embates del partido Republicano y otros sectores de la derecha más dura, como lo es Johannes Kaiser, marcaron un quiebre en el sector, en la coalición que agrupa a Evópoli, RN y la UDI hay tranquilidad respecto a que fue la mejor opción apoyar los cambios propuestos por el Ejecutivo al sistema previsional. 

Sumado a que personeros del sector han destacado que la posición de Chile Vamos se expresó en el acuerdo que finalmente se materializó en ley, en privado, voces de la coalición indican que es un “alivio” haber resuelto la cuestión previsional en el actual gobierno en consideración de la campaña presidencial que afrontará Evelyn Matthei este año. 

En el sector saben que el tema previsional siempre es un aspecto importante del debate presidencial. Por lo mismo, tener un acuerdo aprobado, en el que Chile Vamos tomó parte activa, es un factor relevante para la derecha tradicional a la hora de enfrentar el debate presidencial. 

Eso sí, desde el entorno de Matthei prevén que este será uno de los principales temas que enfrentará a la abanderada de Chile Vamos con José Antonio Kast, carta del Partido Republicano y uno de los principales detractores de la reforma.