La fórmula mágica de profesor para revolucionar enseñanza de matemáticas y mejorar rendimiento de estudiantes
En el panorama educativo chileno, Mauricio Pizarro destaca como un innovador que ha encontrado una fórmula mágica para transformar el aprendizaje. Este docente, apasionado por la educación y la magia, está llevando a cabo un proyecto único en Chile: fusionar el arte de la prestidigitación con la enseñanza tradicional, especialmente en el ámbito de las matemáticas.
"La magia puede ser una herramienta poderosa en el proceso de aprendizaje en el aula, porque combina sorpresa, curiosidad y emoción, elementos clave para captar la atención de los estudiantes y motivarlos a aprender", explica a El Desconcierto el Profe Mago como él se denomina.
Su enfoque se basa en la utilización de trucos de magia matemáticos para enseñar conceptos como el cálculo mental y las predicciones numéricas, que son parte de los objetivos de aprendizaje del curriculum.
Magia, creatividad y comunicación
En las clases de Pizarro, los trucos de magia no solo sorprenden a los estudiantes, sino que también les ayudan a comprender conceptos matemáticos, fomentar la creatividad y desarrollar habilidades de comunicación. "Utilizo trucos numéricos, como 'piensa en un número' o 'adivinación de números', porque permiten enseñar operaciones aritméticas, álgebra y patrones matemáticos de una manera entretenida", señala el profesor.
La metodología de Pizarro va más allá de los simples trucos. "Al desglosar el truco después de realizarlo, los estudiantes pueden analizar las operaciones involucradas y comprender cómo ciertas reglas matemáticas se aplican para llegar a un resultado predecible", añade. Este proceso de descomposición matemática no solo refuerza el aprendizaje, sino que también estimula el pensamiento crítico y analítico.
Además de los trucos numéricos, Pizarro utiliza la aparición o desaparición de objetos como una herramienta de pausa activa en el aula. "Esto permite a los estudiantes un respiro necesario en medio de la clase, lo que me permite continuar con el foco de atención de mis estudiantes", explica.
Cambio de predisposición hacía las matemáticas
La idea de fusionar la magia con la enseñanza surgió de manera orgánica para Pizarro. Como músico con más de 20 años de experiencia, solía llevar instrumentos al aula para hacer las clases más divertidas y lúdicas. Sin embargo, con la llegada de la música urbana, que utiliza principalmente bases y no instrumentos tradicionales, se vio en la necesidad de buscar otras formas de hacer sus clases entretenidas.
"Comencé a comprar cosas de magia, la cual me gustó mucho, y al cabo de un tiempo comencé a estudiar y tomar clases para perfeccionar mi técnica", recuerda Pizarro. Después de más de 10 años perfeccionando su arte mágico, hace 5 años decidió incorporarlo a sus clases de matemáticas.
"Los estudiantes se encuentran con unas clases más amigables y divertidas, y no solo eso, sino que ha cambiado su predisposición hacia la asignatura", comenta Pizarro. "Matemática es complicada, pero gracias a esta innovación es que ahora se acercan más y esperan con ansias sus clases de matemática".
Mejoras en rendimiento académico
Este cambio en la actitud de los estudiantes se ha traducido en mejoras tangibles en su rendimiento académico. El Profe Mago ha notado que responden mejor a las evaluaciones, ya que han logrado una mejor concentración y, por consecuencia, una mejor retención de los contenidos. "Han logrado un aprendizaje significativo a través de un aprendizaje activo en el aula", destaca.
La metodología de Pizarro ha trascendido las fronteras de su aula. Durante la pandemia, realizó un taller dedicado a docentes de distintas áreas y niveles educativos. "Tuve más de 500 docentes matriculados desde Arica hasta Chiloé, así también como gente de Colombia, Portugal, Australia, Estados Unidos, Canadá, y Perú", cuenta con orgullo.
En este taller, Pizarro enseñó trucos de magia utilizando solo objetos caseros, adaptándose así a las limitaciones del confinamiento. Esta iniciativa permitió que cientos de docentes pudieran replicar y enseñar estas técnicas en sus clases online.
La comunidad educativa en general ha recibido con entusiasmo esta innovadora metodología. Los apoderados agradecen que sus hijos e hijas tengan clases distintas y más entretenidas. "Siempre recibo el mismo comentario de parte de los adultos y es que 'profe, me hubiera gustado a mí aprender así, con magia, tan entretenido'", cierra Pizarro.