En julio de 2017, una intensa nevada afectó a la Región Metropolitana, causando cortes de suministro eléctrico durante varios días en distintas zonas, incluida la comuna de La Cisterna.

Uno de los afectados fue el dueño de un local comercial, quien estaba fuera del país durante todo ese mes.

Según se puede apreciar en el fallo judicial, al regresar el 3 de agosto y abrir su negocio, descubrió que gran parte de sus productos alimenticios, que dependían de refrigeración continua, se habían echado a perder debido al corte de energía.

Las pérdidas fueron significativas, ya que incluían alimentos congelados, cecinas y helados.

El comerciante intentó resolver el problema directamente con Enel, la empresa responsable del suministro eléctrico.

Tras varias llamadas y reclamos, le informaron que debía presentar toda la documentación necesaria. Sin embargo, a pesar de haber seguido todos los pasos, la respuesta de la empresa fue tardía y confusa.

Inicialmente, le ofrecieron una compensación de $494.000, pero luego redujeron esa cifra a $157.138, lo que provocó su frustración.

A pesar de sus intentos por llegar a un acuerdo amistoso con Enel, la falta de respuesta y la oferta insatisfactoria lo llevaron a presentar una demanda ante la justicia.

El comerciante pidió una indemnización total de $4.612.120 por el valor de los productos dañados, las pérdidas en sus ventas y el daño moral causado por la negligente respuesta de la empresa.

Argumentó que la nevada había sido anunciada con antelación por las autoridades, por lo que Enel debió haber estado preparada para evitar un corte prolongado del servicio.

Enel, por su parte, alegó que la nevada fue un evento inusual y que la caída de árboles sobre las líneas eléctricas no podía haberse previsto.

Aún así, la empresa desplegó cuadrillas de trabajo para reparar los daños lo más rápido posible.

Finalmente, el tribunal falló a favor del comerciante. La Corte determinó que Enel fue negligente al no restablecer el suministro de manera oportuna, afectando gravemente el negocio del demandante.

En su sentencia, la Corte ordenó a Enel pagar una indemnización de $538.720 por los productos perdidos y $1.000.000 por el daño moral causado por la situación, confirmando así que la empresa tenía la responsabilidad de actuar con mayor diligencia ante el evento climático anunciado.