Alumno fue expulsado por compartir con compañeros vaper con marihuana: Fue reintegrado por fallo
Un estudiante de cuarto medio fue expulsado de su colegio en Valparaíso luego de ser acusado de consumir y vender marihuana dentro del establecimiento.
Según el colegio, varios estudiantes y funcionarios afirmaron que el joven ofrecía marihuana a otros alumnos, además de consumir drogas tanto dentro como fuera del colegio.
También señalaron que había sido sorprendido usando un vaper en el baño del colegio, sin tener certeza de si contenía marihuana o nicotina.
Ante esto, el colegio activó el protocolo llamado Aula Segura, que permite expulsar a estudiantes que alteren la convivencia escolar, y decidió su expulsión.
La madre del joven, sin embargo, presentó un recurso de protección ante la Corte, argumentando que la expulsión había sido injusta.
Ella explicó que su hijo solo reconoció haber usado un vaper en una ocasión, pero no que hubiera consumido marihuana en el colegio ni que se dedicara a vender drogas.
También destacó que el joven tenía un buen rendimiento académico, con un promedio de 6.3, y que estaba a solo seis meses de graduarse.
Además, señaló que su hijo llevaba 14 años en el colegio y que incluso había sido elegido como mejor compañero por sus compañeros de curso.
Para ella, el colegio había utilizado a su hijo como un "ejemplo" para asustar a los demás estudiantes.
Al revisar el caso, la Corte de Apelaciones de Valparaíso decidió que la expulsión del joven no había sido justa.
Los jueces señalaron que el colegio no dio suficientes detalles sobre las acusaciones, lo que dificultó que el estudiante pudiera defenderse correctamente.
También señalaron que las pruebas en las que se basó el colegio no eran claras, ya que se trataba de comentarios vagos y de un solo incidente.
Además, la Corte señaló que el colegio había agregado otros cargos, como el consumo de hongos alucinógenos y el uso de un vaper, sin haberlos incluido en las acusaciones originales.
Esto afectó aún más el derecho del joven a defenderse de manera adecuada.
En su decisión, la Corte concluyó que el proceso de expulsión fue arbitrario, ya que no se le dio al estudiante la oportunidad de defenderse correctamente y no se siguió un procedimiento justo.
Por esta razón, la Corte decidió dejar sin efecto la expulsión, permitiendo que el joven continúe sus estudios en el colegio donde había estado toda su vida escolar.