La vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, y el exmandatario y aspirante republicano, Donald Trump, se enfrentan este martes a las 22:00 horas de Chile, en su primer debate electoral de cara a las elecciones del 5 de noviembre que definirán al sucesor del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.

Se trata de un encuentro que se genera tras la bajada del actual mandatario, que abrió la puerta a la afroamericana que hace algunas semanas tomó su lugar, y esta noche se mide ante el empresario en un momento en el que los sondeos no anticipan todavía a un ganador claro.

Para esta cita, se ha elegido como escenario el National Constitution Center de Filadelfia, Pensilvania -estado decisivo-, en una instancia que tendrá como maestro de ceremonias al canal ABC News.

El debate durará 90 minutos y tendrá dos pausas comerciales, mientras que los presentadores David Muir y Linsey Davis oficiarán de moderadores, siendo ellos los únicos autorizados para hacer preguntas a las que los candidatos no tuvieron previo acceso.

¿Cómo llegan aspectados?

Pese a que este 9 de septiembre, el promedio de las encuestas efectuadas por la web FiveThirtyEight mostraba a Harris con una ventaja de 2,8 puntos sobre el republicano, hasta recabar un 47,1% de la intención de voto, este martes se habla de otra tendencia.

De hecho, según lo que reporta Agencia EFE, una encuesta de Marist Poll para la cadena NPR publicada durante esta misma jornada, reporta que Harris obtendría 49% de los votos a nivel nacional, mientras que el ultraderechista se haría del 48%, una diferencia tan acotada que con el habitual margen de error estadístico, supone un empate técnico.

Comparativamente, en el mismo sondeo correspondiente al mes de agosto, la vicepresidenta demócrata capitalizaba tres puntos de ventaja al exmandatario republicano, lo que demuestra que la carrera electoral se está estrechando.

Como sea, los comicios se decidirán en siete estados clave y el margen en ellos, según FiveThirtyEight, sería bastante ajustado, dado que de momento, Harris está en cabeza en Wisconsin (+2,8 puntos), Michigan (+1,9), Pensilvania (+0,6), Carolina del Norte (+0,6), Nevada (+0,5) y Georgia (+0,3), y Trump en Arizona (+0,5). Ganarse el favor de los indecisos es clave para ambos.

"¡Están empatados hasta en las casas de apuestas!"

Consultado al respecto Gonzalo Valdés, subdirector del Instituto UNAB de Políticas Públicas, releva el estrecho margen entre ambos.

"Ambos candidatos están prácticamente empatados, tanto a nivel nacional como en los estados bisagra (los “swing states”). ¡Están empatados hasta en las casas de apuestas!", dice.

Al mismo tiempo, comenta, "las bases de ambos candidatos están relativamente firmes y serán unos pocos indecisos los que definirán la elección".

"El debate probablemente movilice o cambie el voto de pocas personas, pero esas personas harán la diferencia de quién pierda o gane".

Por lo mismo, complementa, "ambos intentarán atacar al contrincante de forma brutal. Si un candidato comete un error en el debate, probablemente le cueste la elección".

¿Qué se juega esta noche?

El debate del 27 de junio, que cimentó el retiro de la carrera por la reelección de Biden, demostró el peso de esta cita para la ciudadanía, por lo que lo que se juega cada uno de los aspirantes a la Casa Blanca en el enfrentamiento de esta noche, alcanza una relevancia significativa.

Para Harris, es su debut en una instancia como esta, dado que jamás ha participado en un debate presidencial y, hasta la fecha, apenas ha concedido algunas entrevistas desde que asumió el relevo de Biden, en julio. Su desafío entonces es no solo darse a conocer, sino exhibirse como una candidata a la altura del puesto al que aspira.

Trump (2017-2021), en tanto, llega con la experiencia de su anterior mandato y de los siete debates que ya ha protagonizado. Según Aaron Kall, experto en Ciencias Políticas de la Universidad de Michigan, su pasado en programas de telerrealidad hace además que esté más cómodo con las cámaras en los platós, y su personalidad tiende a no tener miedo a decir o hacer "lo que sea" para evitar ser presa de ataques.

Coincidendo con Kall, Valdés asegura que "Trump es hábil en el escenario, y difícil de manejar por parte de sus rivales. Su experiencia en la televisión y reality shows varios lo convierten en una persona con gran manejo con las masas. Quizás por la misma razón, su personalidad y forma de actuar es “poco presidencial”, incluyendo exabruptos y frases a veces incoherentes".

Harris, agrega, "no es especialista en los debates en vivo; su especialidad son los discursos programados".

No obstante, releva, "su experiencia como fiscal la hace ser más precisa y manejar mejor los términos legales de los que se alimenta la política, lo que la hace parecer más preparada".

Como sea, nuestro entrevistado destaca que este "debate, probablemente defina el destino de la elección".

Temas más relevantes serán inmigración, economía y aborto

Consultado respecto de cuáles debieran ser los temas más importantes del debate y cómo debieran abordarlos tanto Harris como Trump, Valdés asegura que, "a nivel interno los temas más importantes serán la inmigración, la economía y el aborto".

"La inmigración fue un fuerte en la primera campaña de Trump, basada en su famoso muro, y al inicio del mandato de Biden, la vicepresidenta Harris fue la encargada de frenar la inmigración. Es un tema candente, especialmente dadas las expectativas de una nueva ola migratoria desde Venezuela", recalca.

Otro tema relevante, complementa, es el económico, "siempre fundamental".

"Estados Unidos vive hoy una situación inusual, en que los datos económicos parecen ir en ascenso y las expectativas de los agentes especializados también van al alza (la Reserva Federal está bajando la tasa), pero todavía la mayoría de los estadounidenses no siente que está mejorando", detalla.

"Es de esperar numerosos ataques"

Probablemente, comenta, "Harris intentará apropiarse de los datos positivos y dar una señal de que todo mejora, mientras que Trump hará hincapié en la alta inflación del período y en que durante su período había más y mejores empleos".

Respecto al aborto, agrega, "Harris tiene una posición muy clara 'pro choice' (a favor), compartida por la base demócrata. Por lo mismo, es de esperar que sea un punto fuerte en su discurso".

"Para Trump será más complicado, ya que mantiene que es una decisión soberana de cada estado y no a nivel federal, mientras que parte importante de su electorado es 'pro life' (en contra del aborto)", dice.

En consecuencia, releva, "aquí es de esperar numerosos ataques".

Política exterior, marcada por vínculo con China y Gaza

Y "a nivel externo", asegura, "los temas más importantes serán la relación con China, y la guerra en la Franja de Gaza/Israel. En tercer lugar -inesperadamente- caerá la guerra entre Ucrania y Rusia", proyecta.

Por último, "en temas de política externa, la base republicana es bastante uniforme, por lo tanto, es de esperar que Trump mantenga esas políticas".

"Para Harris será más complicado, ya que una parte importante del voto demócrata joven está a favor de que existan dos estados (Palestina e Israel), y considera que la guerra actual es un abuso de parte de Israel, mientras que la élite demócrata considera que Israel tiene derecho total a defenderse de los ataques de Hamás y está de acuerdo con la forma en que Israel ha manejado la situación.

Imágenes: Depositphotos

Montaje: Javiera Muñoz