Vicepresidenta de ChatGPT dicta masterclass en Chile y releva rol: "Está organizando a países de América Latina"
-Le estaba preguntando a ChatGPT sobre unas cuestiones que tengo que hacer en la pega. ¿Qué hacer con la UDI? No me dio la respuesta adecuada.
Medio en broma, medio en serio, el Presidente Gabriel Boric se refirió al uso que le da a uno de los modelos de lenguaje de gran tamaño -LLM- más populares, en la inauguración del quinto Congreso Jóvenes Futuro el pasado 1 de agosto.
Una Inteligencia Artificial como modelo conversacional, es decir un LLM en el que se puede conversar por chat, que fue la primera en ser lanzada y que revolucionó el mercado por sus implicaciones desde la economía - por el aumento de la productividad al automatizar procesos- hasta el medioambiente -por la necesidad de uso de grandes cantidades de agua para el enfriamiento de los Data Center donde se procesan los ingentes datos que le dan forma-.
Luego de ChatGPT -OpenAI- vinieron Copilot -Microsoft-, Gemini -Google- y una de las últimas novedades: Claude -Anthropic-, entre otras, que van dando forma al ecosistema de modelos conversacionales. Y que han provocado la necesidad de pensar en los contornos éticos que se le dan a esta tecnología.
Sin ir más lejos, en mayo pasado la Unión Europea aprobó una ley que regula la Inteligencia Artificial en su territorio -la primera en su tipo en el mundo- que establece protecciones específicas para las personas, en ámbitos como la salud, seguridad y derechos fundamentales. Y si vemos por casa, el Ministerio de Ciencia, encabezado por Aisen Etcheverry, lanzó en mayo la Política Nacional de IA actualizada y su plan de acción, así como una propuesta de ley de IA que busca regular y fomentar el desarrollo ético y responsable de esta tecnología, que pone a Chile a la vanguardia de la región.
Liderazgo de Chile en IA
Es en este contexto, que la visita de Anna Makanju, vicepresidenta de Asuntos Globales en OpenAI, a Chile reviste especial importancia. La abogada y experta en políticas públicas cuenta con una destacada trayectoria en el sector público y privado de Estados Unidos, participó ayer 23 de agosto en un conversatorio titulado “Oportunidades y desafíos de la Inteligencia Artificial” en la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile.
“Chile está organizando a los países de América Latina (en torno a la gobernanza en Inteligencia Artificial) por estas conversaciones. No está desarrollado solo por un país y una universidad, son prácticas que son utilizadas por todos”, aseguró Makanju.
Además, “sé que aquí en la Universidad de Chile, hay algunos programas donde los estudiantes utilizan la Inteligencia artificial, y están permitidos de hacer eso, pero de igual forma hay que tener sentido crítico de lo que sale”, agregó.
“Integrar esta tecnología y experimentar es muy importante”, subrayó.
La delegación de OpenAI también incluyó a Claudia Fischer, integrante del equipo de Asuntos Globales; Nicolás Robinson, jefe de Relaciones Gubernamentales para América Latina y el Caribe; y Bobby Stocker, ingeniero de software y miembro del equipo técnico.
Asimismo, el evento contó con la participación de académicos locales como Lionel Brossi, director del Núcleo Inteligencia Artificial y Sociedad, y Felipe Tobar, director de la Iniciativa Data & AI.
Primera "hackaton" de OpenAI en Latinoamérica
Paralelamente, OpenAI está organizando su primera “hackaton” en Latinoamérica, con Chile como anfitrión. El evento “IA Camp”, que cuenta con el apoyo del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, se lleva a cabo del 23 al 25 de agosto en el edificio de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC).
Durante la jornada de este 24 de agosto, la ministra de Ciencia Aisen Etcheverry conversó con Anna Makanju sobre las implicancias del proyecto de ley que presentó el Ministerio de Ciencia en mayo pasado.
“Lo más importante cuando los gobiernos están pensando en regulación es concentrarse en los resultados. El gobierno conoce las necesidades locales y puede adaptar las regulaciones. Pero las compañías deben tener más control sobre las medidas técnicas de llegar a esos resultados, porque las tecnologías están cambiando muy rápido”, aseguró en la instancia la vicepresidenta de Asuntos Globales de OpenAI.
A su vez la jefa de la cartera de Ciencia aseguró sobre el trabajo que realizan en la regulación de IA “está enfocada en los usos de la Inteligencia Artificial y no en la herramienta misma. Lo hace usando un modelo de clasificación de riesgo, que hemos visto es la dirección en la que se mueven todos los países".
Aunque "tuvimos la duda, a propósito de protección de derechos fundamentales e innovación, de cómo nos hacíamos cargo de los riesgos más relevantes. Miramos con mucho detalle el modelo europeo con esta lógica de certificación de algoritmos. Y de decir tratamos esto como medicamentos y no permitimos que nada entre a mercado hasta que esté completamente certificado o abrimos la puerta a ese riesgo y hacemos una certificación expost. Tomamos la decisión de lo segundo”, debido a la rapidez de los avances de esta tecnología, agregó Etcheverry.
Propuesta de ley sobre IA
Recordemos que el proyecto de ley sobre IA presentado por el Ministerio de Ciencia en mayo pasado pretende promover la creación, el desarrollo, la innovación y la implantación de sistemas de IA centrados en el ser humano. Además, busca garantizar la protección de la salud, la seguridad y los derechos fundamentales de las personas, así como la protección de los consumidores frente a los efectos nocivos de determinados usos de la IA.
El proyecto propone una intersección entre la autorregulación y la regulación basada en el riesgo, clasificando los sistemas de IA en aquellos que presentan un riesgo inaceptable, un nivel de riesgo alto, un nivel de riesgo limitado, y ningún riesgo evidente. Asimismo, establece una serie de principios éticos internacionalmente aceptados, en consonancia con la Recomendación de la UNESCO sobre la Ética de la IA.
Además, la Política Nacional de IA incorpora específicamente los resultados de la Metodología de Evaluación de la Preparación (RAM) de la UNESCO, siendo el primer país del mundo en hacerlo.
Ventajas comparativas
Además, Chile se posiciona como líder en el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial (ILIA) presentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en agosto de 2023. Este índice, elaborado por el Centro Nacional de Inteligencia Artificial (CENIA) con apoyo de organismos internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la CAF-banco de desarrollo de América Latina y el Caribe y la Organización de los Estados Americanos (OEA), sitúa a Chile por encima de países como Brasil y Uruguay.
Entre las fortalezas de Chile destacan su infraestructura de conectividad, con el internet más rápido de la región y la implementación comercial del 5G, así como su capacidad de cómputo en la nube más alto. La existencia de una política nacional en esta materia también lo posiciona por sobre la media de los países de la región en términos de institucionalidad.