2023 y 2024 han sido años en que el régimen de lluvias volvió a la normalidad en el centro de Chile tras más de una década de mega sequía. Se trata de una situación alentadora pero no suficiente para revertir el problema estructural de falta de agua. Según distintos especialistas se necesitarían varios años consecutivos como estos para recuperar el equilibrio hídrico.

Teniendo en cuenta la advertencia, las lluvias han representado un respiro para distintos cuerpos de agua como lagunas y humedales del centro del país, que experimentaron en el último tiempo un aumento en su caudal. Sin embargo, este aumento con suerte llega a cubrir 20% de su superficie máxima histórica.

El monitoreo se hace con imágenes satelitales que muestran la superficie que ha sido recuperada por el agua. Uno de los casos más ilustrativos es el del Lago Peñuelas en la región de Valparaíso, donde se logró captar una recuperación de 424 hectáreas cubiertas por agua, lo que corresponde a un 21% de su superficie máxima histórica desde que se tiene registro.

Monitoreo en el Lago Peñuelas. Foto: Conaf.

Además se evidenció una recuperación en humedales costeros como el complejo de lagunas en la Reserva Nacional El Yali, el Santuario Laguna de Batuco, la laguna de Aculeo y el Santuario de la Naturaleza Laguna El Peral.

Monitoreo en la laguna El Peral. Foto: Conaf.

 En El Yali, la laguna Colejuda abarca ahora una superficie de 7 hectáreas, lo que corresponde a 20% de su máximo histórico. En la laguna Matanzas, se recuperaron 11 hectáreas cubiertas por agua, equivalente a 5% de su superficie histórica. Hay que considerar que este cuerpo de agua atraviesa su mayor sequía de los últimos 35 años.

Foto: Agencia UNO.