Finalmente, y tras múltiples cuestionamientos a sus capacidades físicas y cognitivas, Joe Biden anunció que abandonaba la carrera presidencial por la Casa Blanca. Ahora la interrogante es quién lo reemplazará para enfrentar al cada vez más encumbrado Donald Trump, quien, a pesar de una avanzada judicial en su contra y un atentado fallido, parece más firme que nunca.

La decisión de Biden llega 24 días después de un criticado debate contra Trump en Atlanta. En un mensaje sorpresa publicado en X a las 13:46, hora de la Costa Este estadounidense, el Mandatario de EE.UU. comunicó su renuncia a la reelección:

"A mis compatriotas estadounidenses (...) ser Presidente ha sido el mayor honor de mi vida. Mi intención era buscar la reelección, pero creo que lo mejor para mi partido y para el país es que me retire y me centre únicamente en cumplir mis deberes en el cargo durante el resto de mi mandato".

Un cambio en el tablero de la política estadounidense que ha sumido a la campaña electoral en un caos sin precedentes, con los demócratas sin un candidato claro y los republicanos unidos en torno a un Trump que, tras sobrevivir al atentado, es venerado por sus seguidores como una figura mesiánica.

El dilema demócrata

Una decisión que pone en un dilema a los líderes demócratas: ¿deben respaldar en bloque a la vicepresidenta Kamala Harris o permitir una convención abierta y competitiva en agosto, a tres meses de las elecciones del 5 de noviembre?

Por su parte, Biden no tardó en expresar su apoyo a Harris a través de las redes sociales. En un mensaje publicado en X, media hora después de su carta inicial, el Mandatario aseguró:

"Mi primera decisión como candidato del partido en 2020 fue elegir a Kamala Harris como mi vicepresidenta. Y ha sido la mejor decisión que he tomado. Hoy quiero ofrecer todo mi apoyo y respaldo para que Kamala sea la candidata de nuestro partido este año. Demócratas: es hora de unirnos y vencer a Trump. Hagámoslo".

“Me siento honrada de contar con el respaldo del presidente. Mi intención es ganar esta nominación”, respondió Harris, junto con añadir:

“Haré todo lo que esté en mi mano para unir al Partido Demócrata y a nuestra nación”.

Un apoyo a Harris, que cuenta con una trayectoria marcada por distintos hitos históricos. Fue la primera fiscal de distrito negra y la primera fiscal general en California, así como la primera indio-americana en llegar al Senado. Luego, su nombramiento como vicepresidenta la convirtió en la primera mujer en ocupar ese cargo en Estados Unidos.

Y ahora, es cabeza de serie para convertirse en la candidata demócrata y con la posibilidad de ser la primera presidenta del país.

Sin embargo, otra figura emerge como posible candidata: Michelle Obama. A pesar de haber expresado en repetidas ocasiones su falta de interés en una campaña presidencial, muchos la consideran la única mujer capaz de derrotar a Donald Trump. Las encuestas muestran que cuenta con de apoyo dentro del partido y goza de gran popularidad entre los estadounidenses.

Incluso, Michelle Obama superaría a Trump por un 50% de los votos frente a un 39% del republicano en un hipotético cara a cara, según la encuesta Reuters/Ipsos de principio de julio de este año.

La duda de Michelle Obama

Michelle Obama, de 60 años, es abogada, autora y fue la primera primera dama afrodescendiente de Estados Unidos. Su formación académica incluye títulos de la Universidad de Princeton y la Facultad de Derecho de Harvard. Su experiencia en derecho y administración pública, sumada a su papel durante la presidencia de Barack Obama, la han convertido en una figura nacional de gran influencia.

Durante su tiempo como primera dama, Michelle Obama participó activamente en campañas políticas. Pronunció discursos en las Convenciones Nacionales Demócratas de 2008 y 2012 en apoyo a su esposo, y en 2016 respaldó la candidatura de Hillary Clinton.

Según una encuesta de YouGov de finales de 2023, Obama es considerada la exprimera dama más popular de Estados Unidos desde Lady Bird Johnson. No obstante, el hecho de que nunca haya manifestado interés en presentarse como candidata complica su posible nominación a poco más de tres meses de las elecciones del 5 de noviembre.

Los Clinton con Harris y Obama en silencio

Mientras tanto, figuras prominentes del Partido Demócrata han comenzado a posicionarse. Bill y Hillary Clinton emitieron una declaración conjunta en la que, además de elogiar a Biden, expresaron su apoyo a Harris: "Nos sentimos honrados de unirnos al presidente en apoyar a la vicepresidenta Harris, y haremos lo que sea necesario para ayudarla".

Por su parte, el expresidente Barack Obama también alabó a Biden en una declaración, pero notablemente no mencionó a Harris. Esto ha sido interpretado por algunos medios como una posible señal de que, a pesar de las negativas de Michelle Obama, aún podría haber una puerta abierta para su candidatura.

Fotografía: Redes de Kamala Harris