Desmienten caída apocalíptica de pingüinos de Humboldt: Sería suceso normal en año de El Niño
En 2023, científicos de Chile hicieron una expedición en islas donde anidan pingüinos de Humboldt y contabilizaron 800 parejas reproductivas. Cuando repitieron la expedición en 2024, encontraron solo una pareja reproductiva. La expedición fue replicada por medios internacionales y luego por la prensa local, alertando por la caída vertiginosa en la población de esta especie de pingüino amenazada.
Ahora, investigadores explican que se trató de un problema de desinformación, y que la caída en las parejas reproductivas es un suceso frecuente en años donde está activo el fenómeno de El Niño.
“La caída en el número de parejas entre un año y otro es real. El problema es la interpretación que se hizo de esta expedición y lo que salió en la prensa. Se ha visto una disminución gradual en la población de pingüinos de Humboldt en la última década, pero no es tan vertiginosa”, explica Alejandro Simeone, especialista de la Universidad Andrés Bello.
Según Simeone la caída en el número de parejas reproductivas es parte de la dinámica de esta y otras especies de la costa pacífica de Chile y Perú cuando se enfrentan al fenómeno de El Niño. Interrumpen su reproducción porque las condiciones oceanográficas no son las óptimas y había poco alimento en el mar. Esto no quiere decir que hayan muerto todos esos pingüinos.
De hecho, se espera que durante esta primavera con la llegada de La Niña, haya más peces en el mar como alimento y los pingüinos reanuden la reproducción.
El investigador asegura que el último censo nacional de pingüinos de Humboldt se hizo en el 2017, y esta primavera se va a repetir el ejercicio para poder cuantificar a ciencia cierta la caída que se ha identificado en la población de esta especie en los últimos años, y para determinar cuánto afectaron otros factores como la gripe aviar.
Cada vez menos alimento
Según el investigador, el hábitat del pingüino de Humboldt en tierra está bastante bien resguardado sobre todo en las islas, ya que muchas son parte de áreas protegidas y distintas ONGs han hecho trabajos de erradicación de especies invasoras y más.
“El problema es cuando el pingüino sale a mar abierto a buscar su alimento. Allí se encuentra con redes de pesca y con embarcaciones que están sacando los peces que son el alimento de estas aves, entonces cada vez les cuesta más encontrar alimento y mueren arrastrados por redes de la pesca artesanal”, comenta.
La muerte de pingüinos que quedan enmallados en las redes de la pesca artesanal es un fenómeno que Simeone ha documentado a lo largo de los años, y para solucionarlo llama a reglamentar el uso de redes y definir ciertas épocas críticas, que son los momentos de reproducción y migración, y zonas cercanas a las islas, donde se podrían establecer prohibiciones periódicas de las redes para reducir estos sucesos.
Foto: Agencia UNO.