Representantes de gremios, ambientalistas y autoridades reunidas bajo la Alianza Humboldt llegaron hasta La Moneda para entregar una carta a Gabriel Boric pidiendo que se cree un área protegida de múltiples usos en el archipiélago, de alcance birregional.

Este lugar es considerado un hotspot de la biodiversidad marina a escala mundial, por su diversidad de especies, muchas de las cuales son endémicas. Pero también ha estado en la mira de grandes proyectos industriales, el último de los cuales fue el polémico proyecto minero portuario Dominga, rechazado en febrero de este año.

Por esto, desde las organizaciones solicitan al Presidente acelerar la declaración de esta área, que desde el gobierno ha sido anunciada como un objetivo para el cual se está trabajando.

¿Qué se podrá hacer en el área?

“No estamos en desacuerdo con el progreso y el desarrollo, pero no pueden ser a cualquier costo y hoy no existe nada que regule o cuide el sector de estas amenazas, por lo que sería una manera de frenar todos los proyectos nocivos que quieren instalarse en la zona”, sostuvo el vicepresidente de la Asociación Gremial de Los Choros, Rodrigo Flores.

El representante gremial de pescadores de la zona de Los Choros, Ernesto Fredes, también ejemplificó las actividades con las que se proyecta su rubro, como los cultivos de ostras y una pequeña empresa para el desconche de locos, además de la venta de mariscos vivos.

Para estas actividades, afirma, la posibilidad de que se construyan megapuertos, mineras o desaladoras representa una amenaza. Es por esto que se propone el área marina protegida de múltiples usos.

“Es importante reconocer que esta figura de protección nació desde la comunidad y el principal objetivo es que se sigan realizando aquellas actividades que son sustentables con el Archipiélago de Humboldt, como la pesca artesanal, la cultura Changa, el turismo sustentable y los agricultores con su producción de aceite de oliva”, resume la presidenta del movimiento ambiental MODEMA, Tamara Gaymer.

La solicitud y entrega de la carta también fue apoyada por los diputados socialistas de Atacama y Coquimbo, Daniella Cicardini y Daniel Manouchehri.