Académica y municipales: "El pegamento programático es bien débil en la derecha"
Con las elecciones municipales y de gobernadores en el horizonte más inmediato del interés de los partidos políticos, considerando que estas están agendadas para el último fin de semana de octubre, Nerea Palma, académica de la Escuela de Ciencia Política de la Universidad Diego Portales (UDP), comenta cómo inciden en su despliegue cotidiano estass importante decisiones ciudadanas.
“El cálculo electoral siempre está en todos los partidos, en todas las coaliciones, sea izquierda, derecha, sea centro, el punto de tener elecciones es que la ciudadanía pueda votar por líderes, partidos, por coaliciones que representen sus intereses”, recalca.
Siguiendo con su análisis, plantea que “en ese contexto, las políticas públicas que promueven los diferentes partidos y coaliciones son relativamente claras, diferenciables entre sí”.
“La ciudadanía lo percibe y en base a eso los partidos (se) movilizan sobre los temas que quieren activar en la elección”, sostiene.
Y eso, complementa, “pasa en Chile y pasa en todas partes (...), los políticos son racionales y, por lo tanto, el objetivo número uno de ellos es buscar la reelección, siempre, salvo casos bien puntuales”.
La seguridad, tema complejo en la izquierda
“Teniendo eso en consideración, habría que preguntarse quiénes están haciendo movilización electoral de manera más alineada quizás con políticas públicas que han sido tradicionales en su sector, o más bien con hechos coyunturales importantes”, dice Palma.
Por ejemplo, sostiene, en general la izquierda chilena y latinoamericana, siempre ha tenido dificultades con activar a sus electores en temas de seguridad, porque no es parte de las políticas públicas que la izquierda promueve, pero ahora en este contexto, evidentemente la seguridad se roba la agenda y el calendario electoral en términos de intervenciones, de promesas”.
“Y lo mismo también en el sector que hoy es oposición al Ejecutivo”, agrega.
Entonces, recalca, “desde ese punto de vista, esta movilización electoral que hacen los partidos políticos actuales respecto a la temática seguridad, está alineada con la coyuntura política, la contingencia política, porque es la preocupación número uno de la ciudadanía”.
“Además que son elecciones locales, hay una suerte de cercanía, un poco más respecto de elecciones del Poder Ejecutivo, del Legislativo, y por ende una sensación de que se pudiese hacer algo más en términos de seguridad”, dice apelando a las expectativas del electorado.
Límite institucional, básico para la probidad
Consultada respecto de qué tan relevante va a ser esta elección municipal, considerando el contexto en general y además el fenómeno de corrupción municipal que hemos visto extendido en nuestro país, asegura que esta “es un temática que no está resuelta”.
No obstante, complementa, sólo modificaciones en la estructura municipal podrían garantizar un mejor performance desde sus liderazgos.
“No creo que eso tenga solución sin cambios en las instituciones, sin cambios en la reglas del juego, en los incentivos y desincentivos, porque evidentemente que hay un espacio para la corrupción municipal, y si no hay límite institucional, simplemente vamos a quedar al alero de lo que puedan limitarse o no los individuos, en este caso los alcaldes, las alcaldesas”, dice.
“Y lo que muestra la evidencia comparada", agrega, "es que el límite tiene que venir desde las instituciones”.
La oposición, débil programáticamente
Posteriormente, consultada respecto de las opciones que tienen los partidos y coaliciones que estarán en la papeleta de octubre, Palma evidencia sus reparos apuntando a sus debilidades.
“Qué sector veo mejor aspectado para las municipales, en general a ninguno de los dos, ni a oficialismo ni oposición los veo demasiado bien aspectados hoy, fundamentalmente porque la oposición tiene serios problemas de articulación en su sector, muy, muy importantes”, ilustra.
Lo anterior, dado “especialmente por esta expectativa tan grande de poder alcanzar mayor cantidad de alcaldías que tienen al día de hoy, porque tienen menos alcaldías que el oficialismo, y por esta suerte de alternancia que están esperando, eso mismo hace que sea difícil articularles, además que, obviamente el pegamento programático es bien débil en la derecha”.
“Eso no significa que en la izquierda el pegamento programático sea mucho más sólido”, recalca.
Sin embargo, releva, “ ante esta expectativa de ‘podemos perder efectivamente hartas alcaldías’, y sobre todo gobernaciones, hay mucho más incentivo para actuar en conjunto, pero eso no significa que desde la Democracia Cristiana (DC), hasta el Partido Comunista (PC), haya mucho más vínculo programático que desde Republicanos hasta Amarillos”.
Crédito foto: Agencia Uno