El académico de la Universidad Católica de Valparaíso, Felipe Rodríguez, entrega recomendaciones para que padres ayuden a los niños y niñas a desarrollar su imaginación, aprender y divertirse durante las semanas de vacaciones de invierno y así, evitar el aburrimiento.

El cambio de la rutina cotidiana y con ella el comportamiento de las y los menores en casa mientras los padres continúan sus jornadas de trabajo puede causar situaciones estresantes para estos últimos.

Es por esto que, la primera recomendación para evitar el aburrimiento es flexibilizar algunas normas del hogar.

Por supuesto que, "cualquier flexibilidad o cambio que hagamos en las normas y las rutinas, debe estar dentro de los límites que consideramos saludables y necesarios para los niños y adolescentes", enfatiza Rodríguez.

Por ejemplo, dejar que los menores se acuesten o se levanten más tarde podría funcionar, o también, cambiar la manera en que se realizan ciertas tareas del hogar.

"Está bien que puedan dormir un poco más tarde, pero no que pasen toda la noche sin dormir, porque eso puede afectar en la recuperación de los hábitos cuando tengamos que volver a clases”, advierte el experto.

Por otro lado, es importante en la medida de lo posible, que los padres aprovechen ese tiempo para conectar y fortalecer las relaciones con sus hijos/as.

“Ojalá pudiésemos ocupar algunos tiempos para conocer un poco más a nuestros niños y que ellos también conozcan el mundo de los adultos", explica el experto de la Escuela de Psicología.

De esta forma, se pueden emplear juegos ya que "no importa a qué jugamos y sino con quién jugamos y qué contexto construimos en relación con el juego", expresa Rodríguez.