El desconocido vínculo familiar de Auditor General del Ejército con asesino de Víctor Jara
Hace apenas una semana el Presidente Gabriel Boric, haciendo uso de sus facultades constitucionales, aprobó el nuevo alto mando del Ejército para el año 2024. Doce generales pasaron a retiro, 17 uniformados ascendieron a nuevos grados y otros fueron ratificados en sus cargos.
Entre los funcionarios que permanecen en sus puestos de trabajo destaca el actual Auditor General de la institución, Eduardo Enrique Rosso Barrientos, quien integra el alto mando del Ejército desde el año 2021.
Rosso Barrientos es general de Brigada, ingresó como abogado en el año 1996, pertenece al escalafón de justicia -según confirmó a este medio la propia institución castrense- y en la actualidad es miembro de la comandancia en jefe del Ejército, el selecto grupo de generales que lleva la conducción superior del organismo y que encabeza el comandante en jefe, Javier Iturriaga del Campo.
Hasta ahora, poco se sabía de Rosso Barrientos, salvo lo que aparece en sus antecedentes oficiales: Oficial de Justicia Militar en 2005, ascendido a Teniente Coronel en 2008, fiscal militar de Iquique en 2013, ascendido a Coronel en 2017 y general de Brigada en 2020.
[caption id="attachment_879604" align="aligncenter" width="900"] Eduardo Rosso Barrientos[/caption]
Lo que se desconocía en su hoja de vida, sin embargo, es su vínculo familiar con Pedro Barrientos Núñez, exteniente acusado por el asesinato de Víctor Jara, detenido por la justicia de Estados Unidos y prontamente extraditado a Chile por la Oficina de Seguridad Nacional de Tampa.
Barrientos Núñez es hermano de la madre del Auditor General del Ejército y viajará al país el próximo 28 de noviembre para hacer frente a la justicia chilena, luego de ser procesado por el Juez Miguel Vásquez como autor material de la muerte de Víctor Jara, solicitando su captura internacional en diciembre del año 2012.
Múltiples antecedentes
El 10 de octubre de este año, más de una década después de haber solicitado su extradición, Pedro Barrientos Núñez fue finalmente detenido en Estados Unidos, país donde residía desde comienzos de 1990, periodo que coincidió con el retorno de la democracia en Chile.
El exoficial del Ejército había sido requerido judicialmente por nuestro país debido a “los múltiples antecedentes consignados por el tribunal instructor que permiten tener por establecidas presunciones suficientes de participación en los hechos investigados en la causa”.
En el año 2016, las hijas de Víctor Jara y Joan Turner Jara -viuda del artista quien acaba de fallecer a los 96 años- presentaron una demanda civil indemnizatoria en contra de Barrientos en el tribunal federal de Orlando, organismo que lo declaró culpable por torturas y la ejecución extrajudicial del cantante.
[caption id="attachment_879605" align="aligncenter" width="900"] Pedro Barrientos[/caption]
En julio de este año Pedro Barrientos Núñez fue despojado de la ciudadanía estadounidense, luego que el juez del distrito Central de Florida en Estados Unidos, Roy Dalton, determinara que había conseguido la nacionalidad norteamericana de manera ilegal al incurrir en actos ilícitos, falso testimonio y participación en ejecuciones extrajudiciales.
La maniobra permitió acelerar el proceso de extradición. El abogado de la familia Jara, Nelson Caucoto, afirmó en su momento que la medida permitirá “cumplir lo que estaba pendiente del juicio”, considerando que tras la fuga de Barrientos la causa se encontraba sobreseída temporalmente.
Una vez en Chile, será el juez de primera instancia, Miguel Vásquez, el encargado de reabrir un capítulo relacionado con el exoficial acusado de dispararle al cantautor mientras jugaba a la ruleta rusa. Los otros ocho militares involucrados en la muerte de Víctor Jara fueron condenados por la Corte Suprema en agosto de este año. Con Barrientos se cierra el círculo.
[Te puede interesar] Presidente Boric y cientos de personas despiden a Joan Jara: “Su legado es imperecedero”
[Te puede interesar] Valiente: Joan Jara y 50 años de lucha incansable para lograr justicia por asesinato de Víctor