Consejera Zúñiga (RD): “El liderazgo de republicanos se siente bastante débil”
“Invitación por la Unidad”. Así se titula el documento que entregaron las bancadas oficialistas al Partido Republicano y Chile Vamos para llegar a consensos en un serie de ejes, ad portas de que se comiencen a votar las enmiendas.
Estabilidad institucional, igualdad, derechos sociales, seguridad, lucha contra la corrupción y protección del medio ambiente, son los puntos sobre los que se invita a llegar a acuerdos transversales para darle viabilidad al proceso constitucional.
Pero la tarea no es fácil. Pese a que el oficialismo ha redoblado los esfuerzos para concitar consensos, republicanos se muestra implacable con las iniciativas que busca introducir al anteproyecto elaborado por la Comisión Experta.
De hecho, el líder de republicanos, José Antonio Kast, aseguró que en caso de que no se aprueben las enmiendas presentadas por su partido, llamaría a votar en contra de la propuesta constitucional que será a sometida a plebiscito en diciembre de este año.
En ese contexto la consejera Paloma Zúñiga, jefa de la bancada RD, Independientes y Pueblos Indígenas, asegura que el liderazgo del partido que controla el consejo ha sido “bastante débil”.
“Si obtuvieron la mayoría en las elecciones de consejeros, tienen que hacerse cargo de esa mayoría. Y hacerse cargo de esa mayoría es hacer política seria, que a la vez, significa transversalizar, no atrincherarse, conversar con el que piensa distinto, llegar a acuerdos”, enfatiza la consejera en entrevista con El Desconcierto.
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—¿Cómo definiría el momento que está pasando ahora el Consejo?
Estamos en un momento clave, porque nosotros como oficialismo buscamos llegar a acuerdos transversales que es algo que la ciudadanía está pidiendo. La gente reiteradamente pide que los políticos nos pongamos de acuerdo.
Y en ese sentido está la preocupación respecto a ciertos temas que podrían quedar en la Constitución, que son retrocesos para ciertos sectores. Entonces la idea de llegar a acuerdos es que podamos encontrar un punto en común que nos permita tener una Constitución que sea viable.
Por otra parte tenemos el problema de que la ciudadanía siente poca afección al proceso. Pese a este escenario, los consejeros y consejeras tenemos la responsabilidad de hacer todos los esfuerzos necesarios para que esto salga lo mejor posible.
En la mesa de negociación, la cual integro, nosotros hicimos mucho hincapié en que el liderazgo de republicanos se siente bastante débil. Porque ellos nos piden a nosotros (el oficialismo) que seamos muy activos en llegar a acuerdos cuando nosotros no tenemos los votos. Entonces, el llamado es que ellos, como líderes del proceso, tomen ciertas iniciativas para que se pueda arribar a acuerdos transversales.
—¿En qué estado están las negociaciones y las conversaciones?
En este momento, la Comisión cuatro es la que ha logrado mayor avance en las conversación, aunque no en acuerdos precisamente. Hoy se van a reunir representantes de todas las bancadas para afrontar esta difícil misión.
Ahora, lo que a nosotros nos preocupa y en lo que hemos hecho mucho énfasis es en que estos acuerdos deben ser transversales.
Todas las comisiones en su conjunto deben llegar a un acuerdo, porque las constituciones son conjuntos, es una máquina que funciona por completo. No se saca nada con, por ejemplo, incorporar todos derechos sociales en la Constitución si después no van a poder ser ejecutables.
También está el factor de que se presentaron muchas enmiendas y ahí también hay un problema. Y en ese sentido, yo al menos, no he visto ninguna señal por parte del Partido Republicano para bajar, por ejemplo, en la enmienda que libera a los presos de Punta Peuco. Eso me parece grave.
—¿En qué puntos clave busca acuerdos el oficialismo?
Una de las cosas que nos hace participar en este proceso es el Estado Social y Democrático de Derecho y esto tiene que poder ejecutarse. No puede ser un Estado Social en el papel y que en la realidad siga siendo un Estado subsidiario.
En ese sentido, a nosotros nos interesa fortalecer la institución pública, entendiendo todos los defectos que puede el ámbito público, por ejemplo en materia de salud, que son cosas que estamos muy conscientes. Pero para mejorar la salud, tenemos que trabajar en fortalecer la salud pública. Independiente del sector privado que, digamos, tiene sus propias variables.
Por otra parte, nos interesa destrabar el problema de las pensiones. Hoy en día hay un problema en pensiones, que es grave, y el interés de poder llegar a acuerdo en eso es, por supuesto, una de nuestras prioridades.
—Uno de los temas más complejos ha sido el de la seguridad y cómo abordarla a través de la Constitución, ¿Cómo ha avanzado en este aspecto el Consejo?
Yo soy hija de carabinero, por lo que tengo una visión desde dentro de la institución. Entonces nos pareció muy extraño que este capítulo de seguridad no incluyera todas las visiones. Y ese es otro problema, porque la Constitución tiene que ser para todos y todas, independiente de tu color político.
La seguridad es una materia muy atingente y transversal, porque no afecta a una persona de un color político determinado, nos afecta a todos y todas.
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—En un artículo de LT se mencionó que Kast estaba dispuesto a negociar ciertas enmiendas, sobre todo las más duras, ya que algunas habían sido presentadas en respuesta a “peticiones de la ciudadanía”.
La verdad es que no recuerdo ninguna petición popular masiva en el estallido social o en cualquier otro evento popular donde se haya pedido la libertad de los presos de Punta Peuco.
Eso es un tema súper de la elite. No creo que la gente está preocupada de eso. La gente está preocupada de pensiones, de la inflación, de otros temas que son coyunturales y de largo plazo.
—Kast aseguró que si no se aprueban las enmiendas que presentó el Partido Republicano, llamará a votar en contra.
Sería muy irresponsable que la mayoría hegemónica del proceso vaya en contra del mismo. Si obtuvieron la mayoría en las elecciones de consejeros, tienen que hacerse cargo de esa mayoría. Y hacerse cargo de esa mayoría es hacer política seria que, a la vez, significa transversalizar, no atrincherarse, conversar con el que piensa distinto, llegar a acuerdos.
—¿Lo siente como una amenaza?
Es una amenaza claramente y responde a esta forma de hacer política de manera populista. Porque si las encuestas dicen en contra, entonces ellos están en contra. Si las encuestas dicen a favor, están a favor. Al final la impresión que da es que reman para donde va la encuesta.
—¿Pero cree que se pueda a llegar a una nueva constitución con el panorama que se ve ahora?
Eso no depende de mí, o de los consejeros, depende de la ciudadanía que tiene que votar. Yo esperaba, sinceramente, que a raíz de lo que ocurrió el 4 de septiembre y de todo lo que pasó en el proceso pasado, todos los sectores reflexionáramos sobre que si nos atrincheramos no funciona. Y cuando aparecieron las enmiendas, me di cuenta de que todas las fuerzas políticas que están en el poder se atrincheran.
Yo creo que el sueño de una nueva constitución va a estar presente en Chile hasta que efectivamente tengamos una nueva Constitución y que de verdad sea representativa de todos y todas.
—¿Cuál cree que ha sido el error de republicanos en la conducción del Consejo?
A mí me hubiese gustado más humildad por parte del Partido Republicano. Es lo que se espera de una fuerza política seria. Ahora, entiendo que el Partido Republicano no tiene tanta experiencia, es un partido joven, es un partido nuevo, es gente que por primera vez asume un cargo, entonces evidentemente están en su proceso de aprendizaje.
Y si no es en este proceso, será otro en el que tengamos que inscribir una nueva Constitución, pero eso ya no depende de nosotros, eso ya depende del futuro.
—A Chile Vamos se le ha hecho el llamado de tender puentes ¿cómo evalúa su participación en el Consejo?
No voy a hablar de todos en Chile Vamos porque puedo diferenciar entre RN, Evópoli y la UDI.
—¿Hay una división ahí?
Hay una división clara. Y voy a destacar en específico al excelente rol que ha tenido Germán Becker en la comisión. Él ha sido bastante ecuánime, me he sentido escuchada, él ha levantado metodologías de trabajo bastante transversales. Pero por desgracia la actitud del consejero Becker no es el espíritu mayoritario de Chile Vamos.
Hay consejeros que genuinamente han intentado llegar a acuerdos, pero no es lo mayoritario en Chile Vamos.
—¿La UDI se ha plegado más a Republicanos?
Efectivamente, pero no sé si es por un tema de convicción o es por un tema de popularidad. Porque todos quieren estar en donde baila la bonita, como se dice popularmente. Entonces ahí no sé cuáles son las verdaderas intenciones, pero al menos eso hemos visto. Y a veces, hay enmiendas de la UDI que son más neoliberales que incluso las de republicanos.