Como forma de responder a lo que llaman una visión ingenieril de los relaves en el país, investigadores del Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de Desastres (CIGIDEN), decidieron analizar dónde se concentran los relaves y qué condiciones de desigualdad atraviesan las comunas que más los tienen.

Chile es el 3er país en el mundo con más relaves mineros. Hay 757 relaves en el país. Los relaves son infraestructura construida para almacenar material que resulta de la operación minera, conteniendo grandes cantidades de residuos industriales tóxicos.

¿Dónde están los relaves de Chile?

Según descubrió el estudio, los relaves del país se concentran en unas pocas comunas:

De las 346 comunas que hay en el país, 68 tienen al menos un relave.

20 de esas 68 comunas concentran en ellas el 81% de los relaves del país (619 relaves).

De esas 20 comunas, 4 concentran el 42% de los relaves (312 relaves).

Estas comunas son Illapel, Andacollo y La Higuera en la región de Coquimbo, y Copiapó en Atacama.

Estas cuatro comunas tienen un Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) por sobre la media.

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Una nueva forma de ver los relaves

Los autores del estudio plantean la existencia de una injustica socioambiental, dado que los impactos negativos de la actividad minera se concentran en unas pocas comunas que viven condiciones de pobreza.

“La política pública está muy copada de una visión ingenieril sobre los relaves, que no se hace cargo de la desigualdad ni de los conflictos socioambientales. Ante esto, proponemos una gobernanza del reconocimiento, donde para poder afrontar esta injusticia socioambiental, la política pública primero debe reconocer que esa injusticia sucede”, reflexiona Iván Ojeda, académico UCN, investigador CIGIDEN y coautor del estudio.

A partir de los resultados, los investigadores hacen un llamado a que el Ministerio de Minería y el de Medio Ambiente procuren que el Plan Nacional de Depósitos de Relaves que se está implementando en el país, considere esta dimensión social y por lo tanto ofrezca información transparente y explicada sobre los relaves, así como instancias de participación ciudadana en la gobernanza de los relaves.

Urgente catastro

Ojeda indica que la información que tiene el estado sobre los relaves es incompleta, y que no se conocen las condiciones de la infraestructura, ni de la composición química de cada relave, “lo que es importante para asegurarse de que lo que tienen dentro no haga reacciones químicas que generen acidificación, porque ahí es cuando hay filtraciones”, aclara.

“Es importante que el estado pueda financiar un catastro nacional de relaves que tenga toda esta información, ya que hoy no sabemos en qué estado está cada relave, quién es el dueño ni el riesgo que puede haber para las personas que viven cerca”, propone.

Esto se hace relevante dado que los accidentes en depósitos de relaves pueden resultar en tragedias y su riesgo aumenta con los sismos y los eventos climáticos extremos. En Chile, el derrumbe de un tranque de relaves en El Melón dejó cientos de fallecidos en 1965.

Como caso más reciente, en el 2010 el colapso del relave de la minera Las Palmas en Pencahue resultó en la muerte de una familia completa luego de que su casa quedara sepultada por los desechos tóxicos.

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