El excandidato presidencial, Franco Parisi, se encuentra en Chile en medio de la campaña del Partido de la Gente (PDG) para el Consejo Constitucional, y ha rotado en varios medios dando entrevistas.

En ella, ha llamado la atención su endurecimiento en materia migratoria, donde cuestionó que el gobierno “no tiene pantalones” y los instó a “terminar con la inmigración ilegal”.

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“Nosotros lo dijimos desde la campaña de que este gobierno era pro violencia y que era permisivo con la violencia y migración ilegal. Ahora estamos viviendo una crisis de migración que no es fácil de solucionar por los conflictos de ideologías que tienen las autoridades”, comentó.

En su última campaña infructuosa, el 2021, Parisi afirmaba que “la inmigración ilegal es un gran negocio para países latinoamericanos y sus líderes. Es un negocio exportar inmigrantes ilegales en Latinoamérica”.

Y el 2017, cuando intentó ser presidente y luego senador, pero no logró conseguir las firmas necesarias, decía que “debemos frenar el ingreso masivo de extranjeros en situación de ilegales” porque “abrirle las puertas a todos no nos hace buen país”.

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La postura sin fronteras de Parisi

Pero las duras declaraciones de Franco Parisi contrastan con la postura que expresaba la primera vez que participó de la carrera presidencial, hace casi 10 años.

A fines de abril de 2013, cuando aún no alcanzaba las firmas para postular a La Moneda, el entonces candidato independiente participó de un panel de Tolerancia Cero, junto con Matías del Río, Fernando Paulsen y Fernando Villegas.

Allí, transparentó una propuesta que se aleja de sus últimas declaraciones anti inmigración al pedir “libertad para el tránsito de las personas en la frontera”.

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“La razón es muy sencilla”, continuó, señalando que “en Europa tú puedes pasar de Francia a España sin ningún problema, pero yo veo el mapita y están claramente los límites. Esa es mi postura”.

“Bienvenidos los bolivianos. Algunos me van a decir ‘¿Qué pasa con todo lo que es el contrabando?’ Piensa que en la Región de La Araucanía hay tres pasos oficiales y hay 70 ilegales”, lanzó.

Consultado sobre su idea del “libre tránsito” y qué la diferenciaría de lo que existe actualmente en la legislación chilena, agregó que sería “sin fronteras”, una iniciativa que “le gustaría para toda Latinoamérica”.

“Un chileno que va al cine o a almorzar a Tacna tiene que pasar por dos fronteras, hacer dos papelerías. Nosotros queremos eliminar eso. Con eso se obtiene cercanía, se obtiene pertenencia”, aseguró el 2013.