Este miércoles, el Pleno de la Convención Constitucional votó los 36 artículos del informe de la Comisión de Forma de Estado, Ordenamiento, Autonomía, Descentralización, Equidad, Justicia Territorial, Gobiernos Locales y Organización Fiscal, referidos al bloque 1 sobre la forma jurídica del Estado, competencias y regiones.

Frente a la maratónica jornada, que culminó en horas de la madrugada, el vicepresidente de la Convención Constitucional, Gaspar Domínguez, hizo un balance positivo, y en conversación con Radio Universo, emplazó a quienes ya están impulsando un llamado a rechazar, de antemano, la nueva Constitución.

Cabe recordar que, tras la primera votación en general de los informes del Pleno, que se celebró el pasado martes, un grupo de convencionales de derecha se declaró “en reflexión”, cuestionando la aprobación de algunos artículos de la Comisión de Sistemas de Justicia.

En paralelo, y mientras la constituyente UDI Marcela Cubillos se descartaba de la declaración de sus pares, en redes sociales volvió a posicionarse el hashtag ‘Rechazo de Salida’, impulsado por representantes de la derecha chilena.

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Sobre la postura de los convencionales de Vamos por Chile, Domínguez señaló que las normas aprobadas por el Pleno cuentan con el quórum mínimo de 2/3 de la CC, equivalente a 103 convencionales, por tanto, no serían “extremas hacia un lado o algo similar; son normas de amplios consensos. Yo le llamaría democracia”.

Así, se refirió a las afirmaciones que han surgido desde representantes de la derecha chilena, como las emanadas por el senador Felipe Kast (Evópoli), respecto a que la idea de rechazar la nueva Carta Magna estaría “creciendo” o “tomando fuerza”.

“La campaña del Rechazo empezó el mismo día en que se ganó el plebiscito del Apruebo. El 4 de julio de 2021, cuando inició la Convención, el Rechazo de salida fue trending topic en Twitter”, dijo.

En ese sentido, expresó, considerando que aún no se ha aprobado ningún artículo en particular, que “me parece, por lo menos deshonesto intelectualmente llamar a rechazar un documento que aún no está escrito. Yo llamaría a la calma”.