En la mañana de este martes, diferentes organizaciones feministas y lesbofeministas llegaron hasta la Corte Suprema de Santiago para exigir la admisibilidad del recurso de queja presentado ante la resolución de la Corte de Apelaciones de Valparaíso que rechazó  -por dos votos contra uno- la solicitud de nulidad de la sentencia que absolvió a Cristian Muñoz, el único imputado en el lesbocrimen de Susana Sanhueza, joven lesbiana que fue asesinada en 2017.

Claudia Amigo, integrante de la organización “Familia es Familia” enfatizó que “el lesbofeminicidio de Susana Sanhueza no puede quedar sin culpables, y ahora durante esta semana la Corte Suprema recibirá nuestra queja y tiene el deber de dar a lugar a un proceso justo, donde la memoria de Susana, la dignidad de su familia y el respeto por su vida sean prioridad”.

En este sentido, Alondra Carrillo Vidal, convencional constituyente e integrante de la Coordinadora Feminista 8M (CF8M), manifestó que “estamos apoyando desde este rol que nos ha tocado asumir, porque creemos fundamental que esta voz que estamos levantando, esta denuncia que estamos construyendo y esta demanda que estamos organizando, pueda ser también la apertura de un proceso de reflexión feminista que nos permita desmontar la justicia patriarcal”.

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“La fuerza feminista, popular y disidente ha abierto un momento histórico en nuestro país y ese es un momento también en el que tenemos que levantar nuestra propia voz”, añadió Carrillo.

En tanto, Francisca Baeza, integrante de la organización Reconstruyendo Espacios, relató que “hemos acompañado a la familia de Susana Sanhueza, especialmente a Nieves, su madre y Andrea, su hermana, y queremos profundamente agradecerles el poder visibilizar este caso como lo que es, como un crimen de lesboodio, ya que ni los tribunales, ni la prensa, ni la sociedad lo ha visto de esa forma”.

“Es súper importante que la familia nos haya permitido visualizar este caso como es, porque no sabemos cuántos casos o situaciones lesboodiantes existen y que no hemos podido reconocerlos como tal”, reiteró Baeza.

Por su parte, Rebeca Zamora, abogada pro bono de la familia de Susana, explico que actualmente lo que se tramita en la Corte Suprema es un recurso de queja disciplinaria en contra de los dos ministros que rechazaron el recurso de nulidad en la Corte de Apelaciones de Valparaíso.

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"Ese recurso a su vez buscó hacerle ver a la Corte la cantidad de indicios que daban cuenta que en el presente caso sí podíamos hablar de un homicidio. Por ejemplo, que el imputado amarrara una bolsa en la cabeza de la víctima o sustrajera sus pertenencias para luego huir del sitio del crimen y proceder a destruirlas sin dar aviso a nadie del paradero de Susana", explicó Zamora.

Además, la abogada querellante remarcó que “este no es una instancia, es una queja disciplinaria donde le hago ver a la Corte que existe una falta, un abuso grave de los ministros al rechazar el recurso y donde además podríamos corregir efectivamente esa sentencia. Es el último recurso que nos queda, al menos ante los tribunales chilenos”.

“Si el recurso se acoge, se da a entender que efectivamente los ministros resolvieron con abuso, se enviará a corregir esa sentencia y eventualmente podría implicar la celebración de un nuevo juicio oral”, cerró la abogada.

La instancia de protesta de esta mañana fue apoyada por las organizaciones feministas y lesbofeministas Movimiento Justicia para Susana, Familia es Familia, Reconstruyendo Espacios, Red Chilena Contra la Violencia Hacia las Mujeres, Coordinadora Feminista 8M, La Trinchera LGBTQI, Mapa LGBTQI, Disidencias en Red y Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio.