Con el fin de exponer los daños provocados por los desechos mineros lanzados en el mar por la Compañía Minera del Pacífico (CAP), la organización de conservación marina Oceana, estrenó el cortometraje “Huasco, el sacrificio de nuestro mar”.

El cortometraje cuenta con imágenes inéditas de la tubería que transporta el relave desde la planta de pellets de CAP hasta el fondo marino de la bahía de Chapaco, además de los testimonios de los habitantes de la comuna, quienes han sido testigos del constante deterioro de sus costas.

Liesbeth van der Meer, Directora Ejecutiva de Oceana Chile, señaló que “Con este cortometraje queremos dejar en claro por qué la disposición de desechos mineros en el mar no se debe permitir jamás en ninguna parte del país”.

“Este es el único relave que se deposita en el océano en Chile, siendo nuestro país uno de los pocos que lo realiza a nivel mundial; se debe aprender de este grave error y del daño causado”, agregó van der Meer.

Cabe recordar que Huasco es una de las denominadas Zona de Sacrificio, debido al alto número de industrias contaminantes que operan en la bahía, donde además de la CAP, operan termoeléctricas a carbón y el único relave minero que en Chile es lanzado al mar.

Para el Director de Ciencias de Oceana Chile, Matthias Gorny, “el daño ya está hecho, probablemente en algún tiempo igual van a volver algunas especies que son capaces de vivir en este tipo de ambientes, pero no va a volver a ser como antes”.

Por su parte, los pescadores de la zona afirman que “el pescado desapareció como por arte de magia” y que “ya no podemos comer nada de la costa, está todo contaminado”.

Fin al relave submarino

En 2017, Oceana presentó una denuncia ante la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) en la que acusó a CAP de descargar relaves en el mar sin que esta práctica se encuentre permitida en Chile.

En enero de 2018, la SMA formuló 20 cargos en contra de la empresa por infringir normas ambientales, siendo el de mayor gravedad la descarga de relaves en la bahía de Huasco cuando ni siquiera contaba con autorización ambiental para la disposición de los mismos en tierra.

A raíz de la denuncia, CAP se comprometió a detener el vertimiento de este relave en 2022, finalizando más de 40 años de una práctica prohibida en la mayoría de los países del mundo.

Puedes revisar el trabajo audiovisual en el siguiente link.

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