La Fiscalía Regional del Biobío declaró este martes que el vehículo en el que fue asesinado Moisés Orellana en Cañete, quedó abandonado y sin resguardo policial.

El hecho se denunció en los últimos días desde la familia de la víctima. En efecto, su entorno cercano que aseguró que los autores del crimen tuvieron la oportunidad destruir evidencia relevante para aclarar el homicidio.

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"Inmediatamente después de tomar conocimiento de los incendios de inmuebles; de la muerte del joven Moisés Orellana y la quema de dos vehículos, instruyó a la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales, a la Brigada de Homicidios y el Laboratorio de Criminalística de la PDI, para que concurrieran a realizar las pesquisas y peritajes respectivos", señaló el Ministerio Público.

"Asimismo, se ordenó a Carabineros el resguardo de los sitios del suceso, mientras arribaban los especialistas de la PDI", agrega el comunicado citado por Cooperativa.

Sin embargo, "oportunamente la policía comunicó al fiscal a cargo que debido a que en ese momento no se disponía de una cantidad de funcionarios para atender de manera permanente y segura los, al menos tres sectores de interés criminalístico, las respectivas custodias se realizarían de manera alternada (...) considerando también que se debía prestar apoyo a las víctimas y testigos", ilustra la Fiscalía, estableciendo que efectivamente Carabineros dejó sin custodia la escena del crimen.

No se alteró el lugar del homicidio en Cañete

"Una vez que hubo luz de día, la PDI efectuó una completa labor en los tres lugares ya descritos, más lo realizado en el Hospital de Cañete, donde fue llevada la víctima fatal", reportaron.

"Se desarrollaron peritajes fotográficos, planimétricos y huellográficos, entre otros (...) Se obtuvieron importantes evidencias biológicas, materiales y balísticas concordantes con la dinámica y secuencia de la totalidad de los hechos que se están investigando", agregan.

Además de ratificar la veracidad de lo acusado por la familia, la versión de Carabineros ratifica el reclamo del alcalde Jorge Radonich sobre la insuficiente dotación policial en una comuna donde los hechos de violencia han aumentado.

Familia acusa que existieron "errores desde el comienzo"

Sergio Vidal, primo de Orellana y vocero de la familia, comentó los hechos con la emisora citada. "Desde un inicio dijimos que nos parecía muy extraño que ocurriera una situación así, cuando se supone que un lugar donde hay un delito es un área 'sagrada', para los peritajes", declaró.

"Era muy raro que no se cercara el área, no se tomaran pruebas de manera inmediata, no se pusiera más atención en eso", dijo Vidal. Y a renglón seguido denunció "errores que ocurrieron desde el inicio de la investigación".

Finalmente, Vidal transparentó el propósito de la familia. "Lo único que necesitamos es que se encuentre luego a los responsables", admitió.