Iván (el nombre que utilizaremos para no revelar la identidad de este joven por posible represalias) tenía 19 años cuando pensó en entrar al servicio militar. Su pareja, de aquel entonces, le dijo que sería una buena idea para "ordenar" su vida. Pensó que era bueno, le dijeron que no le harían nada, que ahora era super "playa", sin embargo, cuando entró se dio cuenta de la realidad. El primer día que llegó lo hicieron comer debajo de una mesa.

Estuvo en la institución castrense un año y casi dos meses. No tuvo miedo de aceptar que era anarquista y criticaba las opiniones de sus superiores que eran amantes de la figura de Pinochet. En este periodo sufrió los castigos que se le aplican a las "pelaos" que hacen el servicio. Según cuenta, lo obligaron a fumar haciendo flexiones de brazo hasta que vomitara, le pegaron con un lazo en la planta de los pies. En las campañas durmió a la intemperie, lo dejaron siete días sin comer y, luego, lo obligaron a comer liebres o lo que pillara, entre otros tormentos.

Ahora tiene 21 años y afirma que se decepcionó al ver cómo el presidente Sebastián Piñera ordenó que salieran los militares a reprimir las masivas protestas que estallaron el pasado viernes. "Lo encuentro cobarde, ya que el viejo evadió mucha plata. No es capaz de darle vida digna a su gente que está sufriendo y ahora saca a milicos para que los maten, los violen y los torturen. Me da rabia porque yo confiaba en la institución porque cuando tú juras a la bandera, juras defender a tu país de otro enemigo, no de tu propio pueblo. Eso no está en el juramento", afirma Iván, quien se negó a acudir al llamado de los reservistas que se realizó el pasado lunes 21 de octubre, acción que podría llevarlo a enfrentar a la justicia militar.

"Lo que está pasando no lo encuentro bueno, ni agradable porque, hay mucha gente que se está muriendo a causa de fuerza policial o militar, mujeres violadas, cosas que la institución no sabe controlar porque para qué te voy a decir lo que son los clases, de oficiales a suboficiales, muy calientes con chicas jóvenes. Entonces, sé cómo son los milicos", agrega.

-¿Te criticaron por tu forma de pensar?

-Mi forma de pensar es muy distinta a los compañeros que yo tenía. Ellos eran amantes de Pinochet. Los locos eran admiradores de la milicia. A mí me daban una orden y yo no la hacía. Me quedaba sentado porque no me apetecía hacer esas cosas. Nos mandaron a la frontera con Argentina y nos ordenaban tirarle un balazo a cualquier argentino que pasara. Adentro no le tienen pena ni a los animales.

-¿Con cuál ideología te identificas?

-Soy anarquista. No me dejo llevar por reglas y pelié varias veces por eso adentro.

-¿No es una contradicción ser anarquista y hacer el servicio militar?

-Me dejé llevar por lo que me decían y entré. Fue tonto de mi parte. Varios me decían, "tú no eres para eso", "Te van a vivir retando". Y pasó, me retaron caleta porque siempre hacía críticas, daba una opinión diferente a la del resto. Pero siempre en contra de.

-¿Estás en contra de Pinochet?

-No apoyo en nada a ese viejo, para mí es un asesino, simplemente. Adentro te lavan el cerebro de que Pinochet era un héroe para Chile. Te intentan meter eso. Hablo con compañeros que aún me critican. Me dicen, "hueón, tienes que hacerlo por mi general". Y yo me pregunto ¿tanto les lavaron el cerebro?.

-¿Por qué dices que los militares son calientes?

-Vi a oficiales saliendo con pendejas de 15, 16 años. Las invitaban a salir pa puro tirárselas.

-¿Eso es una práctica generalizada?

-Es que los oficiales son así. Son muy de carrete. Llegan con caña y se desquitan contigo. El copete 24/7.

-Entonces no trabajan mucho si es que están carreteando..

-El oficial qué hace. Te da órdenes y se va a su oficina con su teléfono a jugar Clash Royale o PUBG. Eso es todo lo que hace el oficial. Eso es un teniente o un subteniente.

- ¿Quiénes son los que están en las calles?

-Ahí hay tropa, hay oficiales, pero ellos están mandando solamente. Hay clases que son cabos, sargentos, y algunos ya son viejitos y los mandan a cagarse de frío. Los oficiales no se van a manchar las manos. Ellos dan la orden y después el soldado se mancha las manos. Él se va preso.

-¿Qué opinas de los militares que juegan y abrazan a las personas?, hay gente que cree que son estrategias para limpiar su imagen...

-Creo que es una estrategia para que la gente se calme y hacer que todo parezca que está bien de nuevo. Y que este gobierno siga funcionando como la caca que es. Son estrategias del gobierno o de que el general haya dado la orden para que la gente se tranquilice y no hayan más protestas. Así todos piensan que está todo bien en Chile, que estamos desarrollándonos bien y siga gente ganando $300 lucas, mientras los diputados ganan $9 millones.

-En ese caso ¿los militares están defendiendo el sistema?

-Para mí sí. Son baratos perros del sistema, que se están vendiendo por $159 lucas, porque más allá de eso no ganan.

-¿Cómo te lavan el cerebro?

-Te dicen que las cosas son de una forma solamente. Si tu no pescas lo que él dice, pagas. Entonces, te preguntan lo mismo, y si no respondes como ellos quieren, pagas de nuevo. Hasta que las cosas te quedan en la mente. Te pasan documentales, te muestran que Pinochet fue un héroe. Documentales que me hacían dormir porque me daba paja verlos. Varías veces me mandaron al baño a meterme abajo de la ducha.

-Me imagino que te castigaban harto si estabas en contra de lo que decían..

-Sí po. Te hacen fumar haciendo flexiones de brazo hasta que vomites. Te hacen poner el poto en la nieve. Marchar 20, 30 kilómetros con una mochila de 50 kilos más el fusil que pesa 7, más el casco y el chaleco. Una vez estuve hasta las cinco de la mañana haciendo punta y codo, terminé con los codos sangrando. Te tiran lacrimógena, te hacen jalar polvo químico. Su objetivo es transformarte en alguien frío, un perro, para ellos eso es ser soldado.

-¿Es verdad que los militares ven a los civiles de otra manera?

-Sí. Te meten eso en la cabeza. Te dicen, "es que los paisa". Así le dicen a los civiles o "turro".

-O sea, por ejemplo, un periodista sería un paisa...

-Un oficial diría que eres un "paisa".

-¿Por qué existe esa distinción con los civiles?

-Según ellos, los militares son diferentes, tienen mejores valores, tienen una educación más alta que los "paisa". Son superiores. Ellos creen que todo lo que dicen es verdad. Esa es la diferencia del uniforme al "paisa". Por un uniforme te hacen cambiar la mente.

-¿Es más fácil pegarle a un "paisa" que a un militar?

-Siempre nos decían, "si te intentan cogotear, sácale la chucha. Un paisa es un paisa. No va a pasar nada porque se muera un paisa. Tú eres milico".

-Se sienten por encima de la ley...

-De hecho, Carabineros te tiene que hacer honores. Cuando tú eres milico, te tienen que hacer honores por respeto, porque el militar es más antiguo que el paco. No les importan mucho a los milicos los Carabineros.

-¿Qué mensaje le mandarías a los militares que están en la calle?

-Suelten el fusil y pónganse a favor de la gente que los vio salir adelante. Sean humildes. No hagan sufrir a la gente y defiendan a su pueblo. Que no pase lo mismo que el 73'.