Mis lecturas son más de carácter existencial, de autoconocimiento, y de promoción del arte como hecho terapéutico para la transcendencia espiritual, pero estos son los libros que recomiendo. De Rebelión en la Granja se dice ser una sátira del gobierno socialista de Stalin, por lo que no demoré en encontrar puntos en común con el proceso que estaba viviendo Venezuela durante el gobierno de Hugo Chávez: establecimiento de normas para crear un nuevo orden, identificación de un enemigo en torno al cual cohesionar a un grupo, y la ilusión de que todos somos iguales.

1984 va un paso más allá, ya que no describe el proceso de gestación de una dictadura a través de la manipulación de la palabra, el engaño y la corrupción, sino que la justifica, incluso, sociológicamente. Esta novela de ficción muestra la dinámica de un gobierno estrictamente totalitario, que estructura a la sociedad en segmentos bien demarcados y en torno a un pensamiento único, donde la disidencia se paga solo con la muerte.

Es claro que la ineficacia del gobierno venezolano lo imposibilita de llegar a los niveles de vigilancia que una novela de ficción puede desarrollar, pero a su vez, esa incompetencia y corrupción lo lleva a ejercer el control a través de la desatención de las necesidades básicas de la población, también ilustradas en 1984.

Desde la fotografía, vale mirar el primer número de la revista Ojo zurdo, publicación chilena que dedica esa edición al fotógrafo venezolano Nelson Garrido, quien produce su obra en contra de cualquier forma de poder, venga de donde venga. También, conviene consultar el libro [EXPEDIENTES] Fragmentos de un país, con fotografías de Juan Toro Diez que representan los problemas del país entre los que se encuentran la inseguridad, la violencia y la escasez.

Evidentemente, la situación de Venezuela no se reduce a lo político, ya que también tiene mucho de cultural. Distintos literatos y pensadores han descrito la idiosincrasia venezolana a lo largo de su historia, pero de momento dejo a la curiosidad La otra isla, una novela policíaca del autor Francisco Suniaga que narra la odisea de una madre alemana que llega a Venezuela para averiguar la causa de muerte de su hijo, en una de las islas del país.