*Escrito en co-autoría con Bárbara Castillo, encargada de Contenidos Poder Ciudadano y miembro de la Comisión de Programa Frente Amplio

El primer desafío del Frente Amplio es construir cada uno de los espacios con la gente. En definitiva, construir un proyecto político en cada una de las dimensiones (sociales, económicas, comunitarias, electorales), completamente diferente a lo que han hecho los partidos de la casta.  Han sido décadas en que las chilenas y chilenos hemos esperado que la élite defina un quehacer en beneficio de las mayorías, pero hemos visto que cada una de sus propuestas, de sus proyectos de ley, de las leyes promulgadas, han sido en favor del 1% más rico y privilegiado del país.

El próximo periodo político, que se marca con las elecciones de este 2017, nos presenta la posibilidad de ir construyendo un proyecto país democrático, popular, feminista y plurinacional, que refleje la realidad que vivimos chilenos y chilenas, considerando la diversidad de historias, realidades e identidades. Es por eso, que será la gente común, la ciudadanía, con sus vivencias, sus experiencias, sus saberes, los que darán el carácter y la verdadera amplitud a este frente, conquistando nuevos espacios en el parlamento.

En tanto, el segundo desafío es, justamente, desbordar todos estos espacios. No solo construir un frente entre algunas organizaciones emergentes, la convocatoria tiene que llegar a la ciudadanía de manera efectiva, directa y popular. Tenemos que ser capaces de llegar, convocar y construir con el 99% de Chile que ha sido excluido históricamente por la élite. Porque en la medida que la ciudadanía sea partícipe y protagonista, lograremos las transformaciones que el país requiere, porque necesitamos construir una voluntad colectiva y mayoritaria, que no permitan que las soluciones de los problemas y demandas de la ciudadanía, estén supeditados a los grandes empresarios del país.

El programa del Frente Amplio, entonces, debe seguir la misma línea. Tiene que ser el programa de la gente, un programa que represente a las regiones, que muestre la diversidad de Chile, donde escuchemos las voces de quienes se sienten parte del Frente Amplio, así como de quienes no se han convencido del todo aún. Están todas y todos invitados a construir un Frente Amplio para devolver Chile a su gente.

¿Quién mejor que la gente para conocer sus problemas? Chile es un país diverso y multicultural. Los problemas de la gente del Norte de nuestro país no siempre tienen el mismo impacto y dimensión en el Sur; las necesidades van variando de zona a zona. La contaminación que vive la gente de Calama, Copiapó, Coronel, por culpa de las mineras no requiere de las mismas soluciones que la que vive la gente de Chiloé por culpa de las salmoneras. Las visiones de vida de los pueblos indígenas, de nuestros inmigrantes, de la diversidad sexual, de las mujeres, del Chile popular, visiones que siempre se han excluido del hacer política, son la valiosa diversidad que tiene que estar representada en el programa del Frente Amplio, en las ideas y propuestas con las que iremos a disputar las elecciones parlamentarias y presidenciales para ganar.

Es por ello que desde fines de marzo y durante abril se realizarán encuentros programáticos donde toda la ciudadanía puede participar y, se debatirán y decidirán las propuestas para cambiar Chile. Los encuentros serán abiertos, puesto que esperamos que no solo participen las militancias de las fuerzas que hoy componen el Frente Amplio, queremos que participe la gente. De los encuentros saldrán los programas distritales y el nacional, el que será decidido finalmente por un plebiscito donde todas y todos podrán participar.

Si bien, el acceso a Internet nos permite llegar a mucha gente en poco tiempo, y por ello utilizaremos estas herramientas, no podemos olvidar a las personas que no cuentan con acceso a Internet, por ello el proceso garantizará que también ellas y ellos puedan ser parte en igualdad de condiciones. Nuestra convicción es que la ciudadanía es la que debe definir el futuro del país, por ello, eliminaremos cualquier barrera que impida la participación, queremos que todas y todos se sientan convocados a debatir y construir el programa del Frente Amplio.

La participación que tengamos determinará finalmente qué tan amplio es el Frente Amplio, determinará a quiénes estamos llegando, si cumplimos nuestros desafíos o no. Por ello los asumiremos con responsabilidad y convicción, vamos a convocar, a demostrar la transversalidad de nuestro proyecto político. Desafío no menor en el contexto en que vivimos, donde los partidos de la corrupción, esa élite político-económica que gobierna Chile, apartó a la ciudadanía de la toma de decisiones, del poder que nos corresponde.