La mitad de los fallecidos por COVID-19 no fueron hospitalizados en marzo

La mitad de los fallecidos por COVID-19 no fueron hospitalizados en marzo

Por: El Desconcierto | 25.03.2021
Expertos del área médica aseguran que “cuando hay un copamiento de los servicios de atención, la mortalidad oculta empieza a aumentar”, a lo que agregan que este es un fenómeno “preocupante que se ha estado pasando por alto”.

El nivel de ocupación de camas UCI ha aumentado en los últimos días, de acuerdo con las cifras entregadas por las autoridades sanitarias, debido al incremento de casos de COVID-19.

Asimismo, recintos hospitalarios a lo largo del país han alertado por la gran cantidad de personas internadas por coronavirus, indicando además que la cifra de personas fallecidas por la enfermedad sin pasar por UCI va en aumento.

De acuerdo con El Mercurio, los datos del sistema de notificación Epivigila, del Ministerio de Salud, indican que en junio del 2020 alrededor de un tercio de las víctimas no eran hospitalizadas.

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Hoy, en plena segunda ola, los datos del Minsal consignan que un 50% de las víctimas del COVID-19 no fueron internadas en recintos hospitalarios.

Jaime Burrows, ex subsecretario de Salud Pública, señaló al medio que “es probable que estén quedando pacientes fuera del sistema, que no están pudiendo ser hospitalizados oportunamente, porque van a consultar y se trata de mantenerlos de forma ambulatoria y se agravan de manera muy rápida y no alcanzan a llegar”.

“Cuando hay un copamiento de los servicios de atención, la mortalidad oculta empieza a aumentar”, agregó al respecto.

“No es solo un colapso del sistema”

Por su parte, el jefe de la UCI de la Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, aseguró que esto “no corresponde solo a un colapso del sistema, porque al menos en la RM, en mayo y junio del año pasado la situación era más crítica que ahora, aunque en regiones la realidad es otra”.

Asimismo, indicó que en la primera ola los pacientes de COVID-19 podían demorar más de siete días en ser conectados a ventilación mecánica. Hoy, agregó, son “pacientes más jóvenes, pero que en 24 horas se agravan tremendamente y hay que conectarlos a ventilación”.

Pareciera que esperan mucho y llegan más graves o que la enfermedad es más rápidamente progresiva. Eso podría explicar que una parte de los pacientes pueda fallecer antes de que reciba atención”, señaló el experto.

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Para el director del Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello, Héctor Sánchez, este es un fenómeno “preocupante que se ha estado pasando por alto”.

“La presión asistencial que estamos teniendo, con la gran cantidad de casos activos y de nuevos contagios, es muy alta y el sistema de salud está haciendo crisis”, agregó.

De acuerdo con Sánchez, esto puede ocurrir porque “muchos servicios de urgencia en los lugares más críticos, como en Los Ríos, en La Araucanía, Valparaíso, Biobío o la RM, pueden estar muy copados, lo que hace que las personas no lleguen a ser hospitalizadas”.

Hay lugares donde podríamos estar viviendo el dilema de la última cama. No es una situación general del país, pero hay hospitales donde podría estar sucediendo”, aseguró.

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