
Pescadores artesanales se convierten en buzos científicos y ayudan a catastrar la biodiversidad submarina
Con un curso de monitoreo biológico submareal, pescadores artesanales de caletas en las regiones de Valparaíso, Los Ríos y Los Lagos aprendieron junto a científicos cómo catastrar bajo agua la diversidad marina.
La iniciativa forma parte del programa impulsado por la Fundación Capital Azul para crear refugios marinos donde pescadores se comprometen a dejar de pescar en un área, para asegurar la recuperación de especies y ecosistemas, y por ende la sostenibilidad de la pesca en el futuro.
Los integrantes de cinco caletas recibieron una certificación internacional de buceo CMAS junto a la escuela Valposub, y aprendieron cómo monitorear la biodiversidad marina con prácticas presenciales bajo agua, en colaboración con el proyecto GEF de incentivos para conservar la biodiversidad.
Estos conocimientos les permitirán monitorear la biodiversidad en los refugios marinos creados por los pescadores dentro de sus áreas de manejo, y ver si realmente se está recuperando la salud del ecosistema.
En los cursos, construyeron estaciones de muestreo sumarinas y aprendieron protocolos de monitoreo de peces, algas y microinvertebrados. Luego recolectaron datos sobre algas y fauna local para aprender a evaluar a lo largo del tiempo los cambios ecológicos.
Así, los pescadoes se convierten en buzos científicos comunitarios, sumando los saberes adquiridos por años de trabajo en el mar con metodologías probadas para hacer su propia actividad más sostenible.