
Perimenopausia: A qué edad inicia, qué ocurre con tu menstruación y si hay riesgo de embarazo
A determinada edad, las mujeres comienzan a atravesar por una serie de cambios menstruales y hormonales característicos de la perimenopausia, una etapa que precede a la menopausia, que es el fin definitivo de la menstruación.
¿Cuáles son los síntomas de la perimenopausia?
La perimenopausia suele iniciarse entre los 40 y 50 años y se manifiesta mediante alteraciones hormonales que provocan ciclos menstruales irregulares, bochornos y otros síntomas.
En esta etapa se presentan problemas para dormir, cambios del estado de ánimo, sequedad vaginal, sofocos o perdida del deseo sexual.
¿Riesgo de embarazo?
Aunque los ciclos menstruales irregulares podrían hacer pensar lo contrario, la fertilidad no desaparece completamente durante la perimenopausia.
Esta etapa, que puede durar varios años antes de que se confirme el fin definitivo de la menstruación, mantiene activo el riesgo de embarazo, razón por la cual los especialistas insisten en no abandonar los métodos anticonceptivos.
“Muchas mujeres dejan de usar métodos anticonceptivos al percibir que su fertilidad ha disminuido. Sin embargo, mientras exista ovulación, hay riesgo de embarazo. La anticoncepción sigue siendo clave en esta etapa, y debe adaptarse al perfil de salud de cada mujer”, advierte Priscila Preisler, matrona de DKT Chile, organización que promueve el acceso a anticonceptivos seguros y eficaces.
¿Qué métodos anticonceptivos usar?
El uso de anticonceptivos durante la perimenopausia debe ser evaluado de forma personalizada, considerando la historia clínica y los síntomas de cada mujer. Entre las opciones más recomendadas están:
1) Dispositivos intrauterinos (DIU)
DIU hormonal: libera progestina, previene embarazos y también ayuda a reducir los sangrados intensos.
DIU de cobre: libre de hormonas, ideal para quienes prefieren una alternativa natural. Ambos modelos tienen larga duración y alta efectividad.
2) Anticonceptivos hormonales
Disponibles en versiones orales, inyectables o implantes subdérmicos, pueden contener solo progestina o ser combinados con estrógeno.
Además de prevenir embarazos, ayudan a regular el ciclo menstrual, alivian síntomas como los bochornos y reducen el riesgo de osteoporosis.
3) Ligadura de trompas
Para quienes tienen la certeza de no querer más hijos, la ligadura de trompas es una opción definitiva y segura. En paralelo, la vasectomía puede ser considerada por la pareja como método complementario o alternativo.