
Vecinos de Talca pierden batalla contra mega casino al lado de humedal: Se aprueba sin evaluación ambiental
Anunciado en septiembre de 2024, un mega proyecto para construir un casino en Talca, en la zona donde se hacía la Feria Internacional de la comuna hasta 2014, generó alerta entre vecinos y ambientalistas: el predio se ubica en las inmediaciones del primer humedal urbano reconocido en la ciudad, llamado Cajón del Río Claro y Estero Piduco.
Ahora, la dirección regional del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) decretó que el proyecto deberá someterse a evaluación de impacto ambiental, por lo que solo deberá tramitar los permisos sectoriales. Esto implica que no se evaluarán los efectos que tendrá esta construcción en el ecosistema vecino, y que la empresa no deberá comprometer acciones para reducir o compensar esos efectos.
El proyecto también contempla la construcción de restaurantes, un museo, un boulevard, una zona de feria y un anfiteatro para 1500 personas, con una inversión de US$ 21 millones, en una extensión de 4,5 hectáreas de tierra que están clasificadas como zona inundable.
De hecho, durante las lluvias de los últimos inviernos, la zona donde se instalaría el casino y sus alrededores sufrió inundaciones. Esto exacerba la alerta de la ciudadanía con respecto al carácter inundable del terreno, y la posibilidad de que la construcción del humedal intensifique este riesgo, al dejar menos suelo para drenaje.
Según un informe técnico de la Dirección General de Aguas (DGA), para determinar si el proyecto debía o no evaluarse, el organismo declara que el proyecto se ubica sobre una zona de recarga de un acuífero de aguas subterráneas, con alta vulnerabilidad para la contaminación. El informe sostiene que la ejecución del proyecto puede alterar los flujos ecosistémicos del humedal, por lo que debería ingresar a evaluación de impacto ambiental.
Desde la Seremi de Medio Ambiente de la región, en cambio, sugirieron que el proyecto no debía someterse a evaluación ambiental, entre otras cosas porque el titular presentó antecedentes sobre estándares de protección de humedales desarrollados por el Centro de Humedales Río Cruces de la Universidad Austral, que es un referente nacional en la materia. La dirección regional del SEA tuvo la decisión final, declarando que el proyecto no deberá someterse a evaluación de impacto ambiental.