
Vacaciones de invierno 2025: ¿Harás turismo de consumo o prefieres viajar para conectarte con la naturaleza?
El turismo regenerativo progresa como una de las tendencias más relevantes en 2025, particularmente en el marco de las vacaciones de invierno, que tendrán lugar entre el lunes 23 de junio y el viernes 4 de julio, periodo en el que las personas buscan experiencias que no solo brindan descanso, sino también una conexión profunda con la naturaleza y las comunidades locales.
Organizaciones internacionales como el Global Sustainable Tourism Council y la Organización Mundial del Turismo sugieren que el turismo regenerativo ha dejado de ser una tendencia transitoria para convertirse en una necesidad ética de cara a los diversos retos actuales. Su mirada plantea el hecho de viajar no como un acto de consumo, sino como una oportunidad de vínculo con el destino y quienes lo habitan.
Conservar y valorar
“Busca minimizar el impacto ambiental y generar un efecto positivo en el entorno, promoviendo la reforestación, la conservación de la biodiversidad y la valorización de la cultura local. Opera en la lógica de poner en el centro de la experiencia a los destinos, sus habitantes y ecosistemas. Intenta maximizar los beneficios para las comunidades locales y la naturaleza, al mismo tiempo que promueve la protección del patrimonio biocultural y contribuye a la economía local", comenta Dazma Guzmán, coordinadora del programa Vivo Curimón de Fundación Lepe.
En Chile, se ha fomentado mediante iniciativas que consideran la conservación ambiental y el desarrollo económico local. Según la Estrategia Nacional de Turismo Sostenible 2035, se ha convertido en un pilar clave para el desarrollo regional, con un crecimiento sostenido en la oferta.
Experiencias especiales
Bajo este enfoque, las experiencias turísticas se diseñan desde la colaboración, por medio de la plantación de especies nativas, talleres de permacultura, recuperación de alimentos ancestrales o avistamiento de fauna con protocolos.
Como ejemplo, en la Patagonia Argentina, las comunidades mapuches encabezan recorridos que integran espiritualidad, gastronomía y sanación territorial. A escala mundial, urge el turismo masivo, ya que puede provocar consecuencias negativas.
Planificación turística
Sobre la experiencia de Guzmán trabajando en la región de Valparaíso, específicamente en el Valle del Aconcagua, añade que “eventos masivos como la Fiesta del Guatón Loyola, que en 2024 reunió a más de 130 mil personas, muestran que existen momentos de alta presión sobre el territorio, con impactos como la saturación de áreas urbanas y rurales por exceso de tráfico, generación de residuos y riesgo de distorsión cultural. Sin embargo, con planificación, estos desafíos pueden gestionarse y es el trabajo que se está haciendo en el territorio”.
Esto se ha tratado mediante iniciativas como la formación de guías de turismo con certificación internacional “No deje rastro” (Leave no trace); el desarrollo de un sendero educativo en un cerro isla del territorio con información sobre historia, flora, fauna y cultura del Aconcagua.
Además, también se han desarrollado salidas guiadas de “aula al aire libre”, donde han participado más de 600 alumnos de centros educacionales aledaños, para conocer, entender y poner en valor el patrimonio biocultural de su territorio.