
Día Mundial Sin Tabaco: Por qué los cigarrillos electrónicos no son una buena alternativa
En el marco del Día Mundial Sin Tabaco, la Fundación Arturo López Pérez (FALP) instó a reforzar las estrategias de prevención y educación frente al consumo de tabaco, una de las principales amenazas a la salud pública en Chile.
El llamado se da en un contexto donde, pese a los avances legislativos en materia de espacios libres de humo, el tabaquismo continúa siendo responsable de miles de muertes anuales en el país.
Datos del Ministerio de Salud revelan que, solo entre 2022 y 2023, el cáncer de pulmón -fuertemente vinculado al consumo de tabaco- provocó más de 6.900 muertes en el país, representando el tipo de cáncer más letal tanto en hombres como en mujeres.
Esto equivale a un promedio de diez decesos diarios por esta causa.
A nivel global, la situación no es menos alarmante. La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que el cáncer figura entre las principales causas de mortalidad, y en Chile comparte el primer lugar junto a las enfermedades cardiovasculares.
En concreto, uno de cada tres fallecimientos por cáncer en el país tiene relación directa con el consumo de tabaco.
Si bien la normativa nacional ha restringido el uso del cigarro en lugares públicos como universidades, aeropuertos, cines y bares, las cifras reflejan que todavía queda mucho por hacer.
El tabaquismo sigue siendo el principal factor de riesgo de muerte por cáncer en Chile.
A pesar del panorama adverso, desde la Fundación Arturo López Pérez destacan que existen herramientas para revertir esta realidad.
Abandonar el hábito de fumar, mantenerse físicamente activo y evitar tanto los cigarrillos convencionales como los electrónicos puede marcar una diferencia significativa. El daño provocado por el tabaco es acumulativo e irreversible, pero también completamente prevenible.
¿Uso de cigarrillos electrónicos?
Respecto al uso "alternativo" de cigarrillos electrónicos, el Dr. José Miguel Bernucci, director de Prevención y Detección Precoz de FALP, descartó que sea beneficioso. Por el contrario, solo viene a agravar el problema.
Estos dispositivos generan una alta dependencia a la nicotina y pueden derivar en el consumo de cigarrillos convencionales, precisó.
Por lo tanto, los vapeadores no constituyen alternativas "más seguras" pese a que esta industria los venda como productos más saludables.
“La industria busca posicionar los dispositivos de tabaco calentado o vapeadores como alternativas ‘más seguras’, pese a que la evidencia muestra lo opuesto: generan alta adicción a la nicotina, especialmente en jóvenes", indicó.
Frente a este problema, durante el mes de mayo entró en vigencia la nueva normativa que regula el uso y venta de estos dispositivos.
En concreto, serán sancionados aquellos que utilicen cigarrillos electrónicos dentro de establecimientos donde también está prohibido fumar cigarros. Al mismo tiempo, también serán castigados los dueños o administradores de estos locales de permitir que sus clientes realicen estas prácticas.
Por otro lado, frente al desafío por disminuir el uso de vapeadores en menores de edad, estos dispositivos no se podrán vender a menos de 100 metros de establecimientos educacionales. A su vez, serán sancionados aquellos que vendan o entreguen gratuitamente cigarrillos electrónicos a menores de 18 años.