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Corto chileno sobre migrante haitiano triunfa en uno de los festivales más importantes del mundo en su género

Corto chileno sobre migrante haitiano triunfa en uno de los festivales más importantes del mundo en su género

Por: Matias Rojas | 10.03.2025
El cortometraje "El Canon", del director chileno Martín Seeger, fue galardonado con el Gran Prix en el prestigioso Festival de Tampere en Finlandia. El jurado destacó su "original aproximación al tema del colonialismo" y su forma "sarcástica pero conmovedora" de abordar la otredad.

"El Canon", escrito y dirigido por el cineasta chileno Martín Seeger, se alzó con el máximo galardón en el Festival de Tampere, uno de los certámenes de cortometrajes más importantes del mundo que se celebra anualmente desde 1969 en la ciudad finlandesa.

La obra, que compitió entre 123 cortometrajes provenientes de 60 países, recibió el reconocimiento del jurado internacional "por la original e inesperada aproximación al tema del colonialismo". Asimismo, destacaron que "el cineasta juega con la idea de nuestra relación con el otro de una forma muy sarcástica pero profundamente conmovedora".

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La historia detrás de "El Canon"

El cortometraje narra la historia de Jean, un migrante haitiano en Chile que es valorado en diversos ámbitos: como obrero ejemplar, como modelo de belleza clásica en una escuela de arte y como paciente prototípico en el sistema de salud pública. Sin embargo, a pesar de representar los valores clásicos de la Academia, su existencia permanece en el anonimato.

"Jean está ahí para ser contemplado y analizado, pero a nadie le interesa su realidad, sólo importa como objeto, como fascinación conceptual", explica Seeger, quien ha presentado su obra en importantes festivales como los de Guadalajara, La Habana y Buenos Aires.

Con una duración de 20 minutos y protagonizado por el actor Camilus Berdouay, el cortometraje combina crudeza con humor seco mediante una puesta en escena distante que acentúa la deshumanización del protagonista.

"El corto tiene muchos referentes nórdicos. Que el jurado y el público de Tampere hayan valorado el uso de esta estética para abordar una realidad latinoamericana, me demuestra que la apuesta formal funcionó", señala el director chileno, quien anteriormente dirigió "Piotr: Una mala traducción" (2011).

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Reflejo de una realidad migratoria

La obra aborda una realidad social significativa en Chile, donde residen aproximadamente 190.000 haitianos, posicionándose como la cuarta comunidad migrante más numerosa según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

Las barreras idiomáticas, culturales y administrativas han dificultado considerablemente la integración de esta comunidad, muchos de cuyos miembros llegaron tras el devastador terremoto de 2010 en Haití.

El protagonista, Berdouay, conecta profundamente con esta realidad: "Me sentí muy reflejado en el personaje de Jean, su historia encaja con lo que he vivido en Chile. He tenido trabajos muy duros, he pasado por cosas difíciles que la mayoría no entiende y que nadie tendría que vivir".