José Venturelli es de esos artistas chilenos que suelen ser más conocidos en otras partes del mundo que en su propio país. Nació en Santiago en 1924 y murió en Beijing, China, en 1988. Su nombre no resuena como el de Matta, pero lo cierto es que es uno de los artistas fundamentales de la segunda mitad del siglo XX en el arte chileno y latinoamericano, pintor y referente del grabado y el muralismo.

En su vida itinerante recorrió los cinco continentes en busca de la identidad y realidad social de los pueblos, a través de la experiencia personal, la confrontación con la naturaleza y con las realizaciones de otros creadores. Movido por su compromiso social y por los procesos revolucionarios del momento, Venturelli llevó el nombre de Chile a distintas tierras, residiendo y trabajando durante largos períodos en China, Cuba y Suiza, siguiendo grandes proyectos artísticos, sociales y políticos y dejando en ellos un gran legado. 

Con la llegada del golpe militar en 1973, Venturelli partió al exilio en Suiza y su deseo de volver se vio truncado por su fallecimiento el 17 de septiembre de 1988, a 17 días del plebiscito que ponía fin a la dictadura en nuestro país. 

Retrospectiva de un artista itinerante 

En el marco de la conmemoración de los cien años del nacimiento de este destacado artista nacional, el Centro Cultural La Moneda y la Fundación José Venturelli inauguraron hace unas semanas la exposición “Centenario José Venturelli, humanismo y compromiso social” bajo la curaduría de Inés Ortega-Márquez y Christian Leyssen.

Con más de 470 piezas, la exposición presenta la vida y obra de un pintor destacado por su carácter de artista itinerante y quien aplicó diferentes medios artísticos y temáticos en su obra pictórica. Expresó, además, su compromiso social, humanista y político generando impacto e influencia intercultural en diferentes países del mundo.

La muestra se presenta en cinco períodos biográficos y productivos, desde el comienzo de su carrera en la década del 40, el periodo de viajes por 31 países, con énfasis en Chile, China, Cuba y Suiza, hasta su muerte en 1988. Su talento pictórico, su solidez intelectual y compromiso político le permitieron profundizar en las diferentes problemáticas de la humanidad, entendiendo que el arte era una herramienta clave para despertar una conciencia social y en donde la mezcla de colores, trazos y técnicas le permitieron converger en una síntesis de expresiones artísticas en espacios geográficos simultáneos alrededor del mundo.

Desde el Centro Cultural La Moneda, Regina Rodríguez, directora ejecutiva, destacó el profundo compromiso social del artista. “Figuras como Venturelli nos devuelven la esperanza en que seremos capaces de contribuir desde la cultura a la construcción de un futuro para las nuevas generaciones, quiero creer que en ese futuro, Venturellii aparecerá en los libros de texto junto a Gabriela Mistral y otros grandes artistas”.

Por su parte, Malva Venturelli, directora de la Fundación José Venturelli y nieta del artista, comenta que tanto para la familia como para la fundación es de suma relevancia que se ponga en valor el legado patrimonial del artista. “Como fundación trabajamos arduamente, durante todo 2024 en una programación nutrida de exhibiciones y actividades de mediación artística en establecimientos educacionales llevando la obra, legado y pensamiento político y social de Venturelli a las nuevas generaciones, entendiendo que son las bases de las audiencias futuras que consumirá cultura en nuestro país”.

Sobre la obra de su abuelo, asegura: “No creemos que la obra y figura de José Venturelli sea reconocida como merece en Chile, ya que no se le ha dado el lugar que merece dentro de la historia de las artes visuales. Por años ha existido una invisibilización sistemática de su legado, y ha sido muy difícil para la familia y la fundación derribar esa realidad. Esperamos que con el centenario y el apoyo de las autoridades esto cambie, porque José merece un lugar protagónico dentro de las artes visuales nacionales”.

La exposición del Centro Cultural La Moneda es la mayor muestra que se ha realizado del artista en Chile, considerando el volumen de obras, objetos que la componen y el trabajo colaborativo entre instituciones. Se trata de una exhibición gratuita, y permanecerá abierta hasta el 6 de abril de 2026 en las Salas Andes y Pacífico (nivel -3).

Primera edición en Chile

A la exposición se suma la reedición de la carpeta de arte “Quelque part de tout temps”, que fue publicada en Suiza en 1981 y hasta ahora no existía en Chile. Los encargados de esta reedición son Perroseco Editores, quienes en 14 láminas impresas en papel de algodón reviven las ilustraciones realizadas por el artista en sus últimos años en Europa.

Esta edición cuenta con el apoyo de la Fundación José Venturelli, y ha sido muy bien valorada por Malva Venturelli, actual directora y nieta del pintor. 

“Todas las iniciativas que permitan difundir y visibilizar la obra y legado de Venturelli son valiosas, no solo para la figura del artista, sino también porque pone en valor la identidad nacional, la historia de nuestro pueblo. Por un lado, la exposición del Centro Cultural La Moneda permite dar cuenta no solo de la versatilidad del artista y de su aporte diplomático cultural, sino también de parte de la historia de nuestro país, y de los hitos políticos y sociales del siglo XX".

En el caso de la carpeta de Perroseco, Malva destaca que se trata de un trabajo inédito. “Es la primera vez que se reedita una serie de obras de Venturelli, y siento mucho orgullo y agradecimiento de esa acción, ya que permite llevar a las nuevas generaciones la obra de este artista histórico, y democratizar el acceso a la cultura al hacer posible que más personas se acerquen a la obra de un artista de la talla de José Venturelli”. 

La carpeta de Perroseco Editores conserva el formato de la versión original del artista. Y está disponible en preventa en su cuenta de Instagram @perrosecoeditores.