Tragedias aéreas enlutaron al mundo la última semana del año: Corea del Sur, Kazajistán y el incidente en Canadá
Corea del Sur, Kazajistán y Canadá han reportado accidentes aéreos durante la última última semana del año 2024, y es que en los primeros dos países los incidentes fueron de tal envergadura que cobraron la vida de decenas de personas.
Tragedia en Corea del Sur
El domingo 29 de diciembre, un registro del medio local MBC permitió observar el momento exacto en que una aeronave se estrella causando el deceso de casi todas las personas que iban a bordo de ella.
En concreto, el vuelo 7C2216 de la surcoreana Jeju Air estalló tras tomar tierra sin el tren de aterrizaje desplegado, estallando contra un muro fuera de pista en el aeropuerto de Muan (suroeste).
El accidente dejó 179 muertos y solo dos supervivientes, lo que supone el peor siniestro de la aviación civil ocurrido jamás en suelo surcoreano y el peor de todo 2024 a nivel global.
Tras el accidente el Gobierno surcoreano ha declarado siete días de luto nacional. Además, anunció que reducirá los festejos para celebrar la llegada del año nuevo en señal de respeto a los fallecidos.
El tradicional tañido de la campana de Bosingak en la medianoche de mañana 31 de diciembre se llevará a cabo, pero los números musicales que iban a celebrarse antes y después se han cancelado.
A medianoche también se izará detrás del pabellón que alberga la campana una escultura de unos 30 metros en honor de las víctimas.
Una cuenta atrás prevista también en la céntrica plaza de Gwanghwamun se celebrará sin efectos de sonido, detalló el Gobierno Metropolitano.
Se instalará ademas ante el Ayuntamiento de la capital surcoreana un altar en memoria de las víctimas del accidente aéreo de la víspera y se ha pedido a los distintos distritos de la capital que cancelen sus tradicionales eventos para presenciar la salida del sol el 1 de enero.
Navidad negra en Kazajistán
Un avión de pasajeros con 67 personas a bordo se estrelló el pasado 25 de diciembre, junto al aeropuerto de la ciudad kazaja de Aktau, a orillas del mar Caspio, informaron los servicios de emergencia de Kazajistán.
Según las autoridades kazajas, el avión siniestrado era un Embraer 190 perteneciente a la compañía Azerbajan Airlines, que se dirigía de Bakú a Grozni, la capital de la república rusa de Chechenia.
El siniestro dejó a 39 personas muertas según informó el viceprimer ministro kazajo, Kanat Bozumbáev, que encabeza la comisión estatal para investigar los motivos del accidente.
Bozumbáev señaló que los restos de los fallecidos "están en malas condiciones, en lo fundamental calcinados. Fueron trasladados a la morgue donde serán identificados".
Por otro lado, los sobrevivientes se encuentran en estados "grave" y de "máxima gravedad", incluyendo a dos menores de edad.
Kazajistán envió este lunes a Brasil las cajas negras del avión de pasajeros de Azerbaiyán Airlines (AZAL), informó el Ministerio de Transporte kazajo en una nota publicada en su portal oficial.
Según un comunicado emitido el sábado por el Kremlin, el avión de pasajeros azerbaiyano, que volaba estrictamente según el horario, intentó repetidamente aterrizar en el aeropuerto de Grozni, en momentos en que las defensas antiaéreas repelían un ataque de drones ucranianos.
El presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíyev, exigió la víspera a Rusia que reconociera su culpa por el siniestro, castigara a los responsables, y compensara los daños al Estado azerí y a las víctimas.
Si bien en una conversación telefónica el sábado con su homólogo azerbaiyano, el presidente ruso, Vladímir Putin, presentó disculpas por "el hecho de que el trágico incidente haya ocurrido en el espacio aéreo ruso", no admitió que Rusia tuviera alguna responsabilidad en siniestro del AZAL.
No se cuenta dos veces
La noche del sábado 28 de diciembre, el vuelo 2259 de Air Canada experimentó un problema técnico al momento de aterrizar en el Aeropuerto Internacional Halifax Stanfield, obligando la rápida acción del personal de servicios de emergencias.
De acuerdo a los antecedentes revelados, el avión sufrió una falla en su tren de aterrizaje, y en consecuencia, obstruyendo el correcto funcionamiento de uno de los neumáticos.
La aeronave había partido desde el Aeropuerto de St. John's, llegando a Halifax a eso de las 9:30 p. m. AT.
Debido a la falla, el avión de deslizó por la pista de aterrizaje causando que un ala rozara el suelo generando un incendio.
Afortunadamente, todos las personas que iban a borde de la nave sobrevivieron al incidente, siendo evacuados de forma eficiente y segura.