"Es un virus": Ministra Vallejo encabeza acuerdo contra la desinformación de la mano del gobierno de Brasil
En el marco de la gira presidencial a la APEC en Lima y al G20 en Río de Janeiro, las autoridades chilenas han sostenido diversas instancias de conversación con líderes de las economías más importantes del mundo en encuentros de alta importancia diplomática.
Perú, China, Canadá, India y Reino Unido fueron algunos de los países con los cuales el Presidente Gabriel Boric mantuvo diálogos y reuniones bilaterales en el contexto de una nutrida agenda internacional que este martes concluyó con el cierre del plenario del G20 en la ciudad brasileña.
En la comitiva del mandatario no solo había asesores y trabajadores de la prensa, sino también algunos ministros de Estado como el canciller Alberto van Klaveren, la ministra de Desarrollo Social, Javiera Toro, y la ministra secretaria general de Gobierno, Camila Vallejo.
El despliegue internacional de Vallejo en torno a la desinformación
Esta última, de hecho, cumplió un rol destacado en lo que respecta a las relaciones multilaterales, ya que encabezó personalmente un acuerdo con la administración carioca para luchar contra la desinformación y aportar a la construcción de un Pacto Digital Global.
Se trata de un memorandum firmado por ella y el ministro de la Secretaría de Comunicación Social de la República Federativa de Brasil (SECOM), Paulo Pimenta, en el cual se detallan las metas que ambas naciones tienen en virtud del avance de las noticias falsas y los eventuales impactos políticos que estas pueden tener.
De acuerdo con lo planteado por la vocera de La Moneda, es relevante el combate a la crisis climática que afecta a todo el planeta, y por lo mismo la instancia del G20 "nos ha permitido poder contribuir con objetivos concretos (...) Han sido también parte de la declaración conjunta que se firmó ayer (lunes)".
"Este encuentro no solamente reúne a las grandes economías... Estamos hablando de 85% más o menos del Producto Interno Bruto mundial, que se encuentran en este momento en Río de Janeiro, sino que también pone objetivos concretos en materia de gobernanza y en instancias multilaterales", aseguró.
El cambio climático como punta de lanza
La portavoz también destacó los desafíos en torno a la materia, ya sea financieros, democráticos, de desarrollo y "cómo pensar el desarrollo a escala humana y haciéndose cargo de las problemáticas que viven nuestros países, como el hambre, la pobreza, la desigualdad, la inequidad entre el sur global y el norte".
"Sobre las herramientas que necesitamos fortalecer para combatir la crisis climática es que surge entre Chile y Brasil la necesidad de firmar este memorando, un entendimiento para apostar a mayor integridad informativa y con eso combatir la desinformación particularmente en plataformas digitales, en redes sociales", dijo la portavoz.
Esto "porque impide o imposibilita incluso, afecta las herramientas con las que contamos los distintos países para poder hacerle frente a la crisis climática".
"Por eso queremos que este memorando sea no solamente una expresión de la relación que hemos tenido Chile y Brasil histórica, (sino) que sea una expresión tangible también de compartir el valor de no solo las preocupaciones que tenemos en torno a la desinformación como fenómeno global, sino experiencias y aprendizajes", agregó.
Asimismo, planteó las metas de la tratativa en miras a "fortalecer una Latinoamérica más unida y resiliente a la amenaza y al daño que causa la desinformación (...) Confiamos en que somos capaces de enfrentar desafíos globales con soluciones innovadoras que reflejen nuestras identidades y prioridades comunes".
Protección de la democracia y los derechos humanos
"La desinformación es un fenómeno que si bien no es nuevo, todos sabemos que su velocidad y masividad lo hace un gran problema contemporáneo como un virus que se expande rápidamente y pone en riesgo la salud de nuestras naciones", complementó.
De la misma forma, planteó que la desinformación, "que atenta directamente en contra de nuestra convivencia social, erosiona valores fundamentales de la cultura democrática, genera desconfianza, desafección y confusión a través de contenidos diseñados y difundidos deliberadamente para engañar".
Según Vallejo, esta puede manipular "la interpretación de la realidad y con ella impactando la toma de decisiones de las personas e incluso de las políticas públicas. Esto modifica trayectorias democráticas de comunidades y de países completos".
"Hemos sido testigos de cómo este fenómeno ha desencadenado procesos profundamente violentos y antidemocráticos no solo en nuestra región, sino también a nivel global, poniendo en entredicho verdades científicas como el valor de la estrategia de inmunización en el caso de la pandemia o incluso la existencia del cambio climático", argumentó.
En esa línea, sostuvo que "combatir la desinformación es, en esencia, una lucha por la defensa de la democracia, la seguridad y también la soberanía de nuestros pueblos y su capacidad de tomar decisiones frente a fenómenos que son locales y globales".
Garantizar el acceso a la información como principio democrático
"Promover la integridad informativa y garantizar el acceso a información confiable son tareas indispensables para preservar principios democráticos y proteger a nuestras sociedades frente a las amenazas (...) Es una tarea de responsabilidad que no podemos abandonar ni eludir", invitó la secretaria de Estado.
Así, detalló que el memorándum "representa un primer paso en este camino que buscamos recorrer en conjunto Chile y Brasil para defender la integridad informativa como forma de defender nuestras democracias. Refleja también nuestra convicción de que el futuro se construye desde la colaboración activa y estratégica".
"A través de este acuerdo vamos a promover el intercambio de conocimiento en políticas públicas relacionada a la integridad de la información, analizaremos también y avanzaremos en modelos regulatorios y autorregulatorios que fomenten la transparencia de los algoritmos de las plataformas digitales", defendió.
Esto para que, por ejemplo, las empresas "fortalezcan la responsabilidad corporativa y mitiguen riesgos sistémicos en los servicios digitales. También los compromete a promover enfoques inclusivos para los beneficios de la inteligencia artificial de manera segura y ética".
Enfrentar la alfabetización digital: una tarea multilateral y colaborativa
La idea es promover "un desarrollo tecnológico que refleje en nuestras diversidades culturales y sociales. Creemos que generar regulaciones integrales que tengan un correlato entre los distintos estados y que busquen educar y empoderar a nuestras poblaciones es el camino correcto para enfrentar la desinformación y la alfabetización digital".
"Estamos convencidos de que estos no pueden ser esfuerzos aislados de distintos países, sino que requiere de una visión y sobre todo una acción colectiva multilateral. El G20 por cierto representa esa voluntad de cooperación desde América del Sur", proyectó la integrante del gabinete ministerial.
Y concluyó con que "nos estamos haciendo cargo de los desafíos globales trabajando por construir comunidades resilientes y asegurando que los avances tecnológicos estén al servicio del pueblo, respeten los derechos humanos y fortalezcan nuestras instituciones democráticas".