Una exitosa jornada de cierre tuvo la cumbre de líderes del Foro de Cooperación Asia Pacífico (APEC), hasta donde llegaron todos los gobernantes convocados en el marco de las discusiones para facilitar e incentivar los tratados comerciales de los países asiáticos y americanos conectados por el océano Pacífico.

En el contexto de las visitas de Estado a Lima de todos estos mandatarios es que los presidentes de China y Perú se reunieron no solo para conversar sobre cómo acercar más ambas naciones, sino que además inauguraron simbólica y virtualmente, el primer puerto chino en la costa americana.

De Chancay a Shanghái

En lo que representa un hito económico para todo el continente, el nuevo y moderno megapuerto de Chancay contó con una inversión por parte de Pekín de unos 3.500 millones de dólares, iniciará operaciones a comienzos de 2025 y acortará las transacciones marítimas a diez días entre China y Perú.

Se trata de una iniciativa que no solo dinamizará los intercambios portuarios de mercancías sino que también consolida las relaciones bilaterales entre ambos países al convertir a los andinos en un centro logístico e industrial de clase mundial en miras a proyectar de manera estratégica a la región.

Esta infraestructura será de propiedad oriental con un 60% a nombre de la empresa estatal china Cosco Shipping Ports Limited, mientras que el 40% restante corresponde a la compañía peruana Inversiones Portuarias Chancay.

De esta forma, esta 31° versión de la APEC concluye sus diálogos con un vínculo estrecho entre los dos estados cuya conexión, de acuerdo a lo planteado por el jefe del gobierno de la República Popular de China, Xi Jinping, tiene bases filosóficas en virtud de los valores que han defendido ambas civilizaciones en su desarrollo.

Las definiciones de Xi Jinping en torno a Perú

En una columna de opinión publicada por el diario local El Peruano, el presidente Xi destacó las similitudes entre ambas trayectorias en tanto son herederas de una rica cultura milenaria: la china con más de cinco mil años de historia ininterrumpida, y la incaica con una influencia extendida a lo largo de los pueblos prehispánicos de Sudamérica.

Según Xi, el nexo con este “vecino” a la otra orilla del Pacífico está enraizado en las sabidurías de las civilizaciones milenarias. "Cada vez que estoy en esta hermosa tierra, quedo inmerso en el profundo afecto amistoso del pueblo peruano hacia el chino", consignó en su manifiesto.

"Aquí, la gente local llama con cariño a los chinos como “paisanos”; aquí, el 1º de febrero de cada año ha sido declarado como el 'Día de la Confraternidad Peruano-China' por el Congreso; y aquí, los restaurantes chinos también son llamados como “chifas”, agregó el mandatario del gigante asiático.

En ese sentido, planteó que "tanto los expertos arqueológicos chinos como los extranjeros sostienen que la civilización china y las civilizaciones americanas son, en realidad, creadas por descendientes de los mismos ancestros en diferentes épocas y lugares".

Similitudes filosóficas, espirituales y valóricas

"Gracias a las sabidurías de las civilizaciones compartimos visiones similares y estamos unidos de corazón. Los chinos siempre ven 'la sinceridad como lo fundamental y la benevolencia como la moral', mientras los incas apuestan por 'no robar, no mentir, no ser perezoso'", aseguró.

Incluso, la cabeza del que alguna vez fue un imperio -al igual que lo fue el inca- citó al reconocido pensador y periodista marxista peruano José Carlos Mariátegui cuando dijo que "espiritual y físicamente, la China está mucho más cerca de nosotros que Europa. La psicología de nuestro pueblo es de tinte más asiático que occidental”.

"Esto es justamente el 'código secreto civilizatorio' que explica la integración e incluso la inseparabilidad entre los inmigrantes chinos y los peruanos en los últimos 175 años desde la llegada de los primeros chinos a esta tierra", defendió.

Asimismo, agregó que "este afecto es legado de dos historias geográficamente lejanas pero filosóficamente cercanas. Muchos me dicen que los chinos y los peruanos siempre se sienten cariñosos al encontrarse, y les resulta familiar al contemplar las reliquias históricas del otro".

"Los residentes de la antigua civilización Shu (en la actual Provincia de Sichuan) de China expresaron su adoración al Sol y al Dios del Sol con la imagen de aves volantes inmortales con sus alas extendidas, algo idéntico a la civilización incaica, expresando así ambas su anhelo por la luz", rememoró.

Una amistad que zarpa hacia un futuro brillante

El líder internacional -uno de los más importantes del globo- también comentó que "Perú fue uno de los primeros países de América Latina y el Caribe (ALC) en establecer relaciones diplomáticas con la nueva China. A lo largo de más de medio siglo, los lazos chino-peruanos siempre han venido avanzando a pasos seguros".

"China es un amigo digno de confianza para el Perú en momentos cruciales. Además, el Perú fue el primer país de ALC en firmar con China un paquete de Tratado de Libre Comercio y uno de los primeros países de la región en sumarse a la Iniciativa de la Franja y la Ruta", explicó.

Y detalló que "a su vez, China se mantiene como el mayor socio comercial y mercado de exportación del Perú durante 10 años consecutivos. El año pasado, la exportación a China representó el 36% de la total peruana. El stock de las inversiones de empresas de capital chino en el Perú es alrededor de los 30,000 millones de dólares".

De esta forma, Xi propuso "forjar el 'Gran Camino Inca de la Nueva Era' con el Puerto de Chancay como punto de partida, fomentando así el desarrollo en conjunto y la integración de ALC", refiriéndose al reconocido paso que el emperador Inca recorría en medio de las sierras del Valle Sagrado de Cusco.

"Como suelen decir los amigos latinoamericanos, sin coraje, uno nunca conquistará la montaña ni cruzará el mar. En el nuevo punto de partida histórico, con un solo corazón y un coraje inquebrantable, los chinos y los peruanos nos esforzaremos juntos por conducir el barco de la amistad chino-peruana hacia un futuro más brillante", concluyó.