De una derrota a La Moneda: Emilia Ríos abierta a entrar al gobierno tras salir de Ñuñoa
Aparte de la caída de Irací Hassler en Santiago, la derrota de Emilia Ríos en Ñuñoa fue uno de los golpes más grandes que tuvo el oficialismo en las pasadas elecciones municipales.
Se inclinó de manera sorpresiva ante Sebastián Sichel en unos comicios que en la previa parecían ganados, por lo que recién la militante del Frente Amplio se está levantando.
“Las derrotas hay que analizarlas con calma. Hay una autocrítica que, quizás, podemos hacer, que tiene que ver con haber tenido más capacidad de comunicar los logros de esta gestión más sostenidamente durante el tiempo. Nuestro énfasis fue muy de gestión y menos de comunicación”, comenzó.
“Eso frente a un candidato que fue un excandidato presidencial con mucho conocimiento quizás nos pasó la cuenta. Dicho eso, enfrentamos una campaña de Sebastián Sichel que fue muy agresiva, que se basó en medias verdades y en descalificaciones. Lamentablemente, eso a veces resuena más que el debate de ideas”, añadió a La Tercera.
Consultada si su derrota fue un voto castigo contra el gobierno de Boric, dijo que “no, creo que no, porque las administraciones locales se juegan en otros códigos. Los alcaldes y alcaldesas somos figuras cercanas, estamos en terreno, conversamos con la gente cosas muy concretas, como mejorar las plazas, parques, el acceso a la salud primaria. Entonces, yo te diría que eso es lo que siempre más pesa”.
Finalmente, dio luces sobre su futuro político, donde dijo que “ser candidata parlamentaria no está en mis planes”, pero adelantó que el posible cambio de gabinete le abre las puertas de La Moneda.
“Sí, por supuesto. No voy a decir uno u otro cargo, pero una siempre está dispuesta a apoyar en lo que el gobierno pueda requerir”, culminó Emilia Ríos.