A las tanto 21:10 horas de ayer jueves el equipo de comunicaciones de Presidencia citó a la prensa para una pauta en que participaría el Presidente Gabriel Boric. “El Presidente Gabriel Boric, junto con la ministra de Desarrollo Social, Javiera Toro, visita el Centro Diurno de Cuidados para personas mayores de Piuquén en Lampa”, decía la convocatoria. Se trataba de la primera actividad pública del mandatario luego de que estallara la denuncia contra el ex subsecretario Manuel Monsalve por abuso sexual. 

La pauta, en todo caso, pasó a segundo plano. Dándose apenas unos minutos para referirse a la actividad por la que se había hecho presente en la comuna de Lampa, Boric dijo: “No puedo dejar de pronunciarme respecto de los gravísimos antecedentes que han salido a luz pública respecto a una denuncia contra un ex funcionario de gobierno”. 

Tras dar una declaración en que enfatizó en que “nadie puede esconder nada” y que el gobierno “tiene el deber de dar cuenta de todos los detalles que están en su conocimiento”, además de dar su versión sobre cómo, cuándo y dónde se enteró de la denuncia, el Presidente abrió el espacio para hacer preguntas. Ahí comenzó lo que muchos —al interior del gobierno y en la coalición— han calificado como una “debacle”. 

“Dado lo relevante del caso, quedo atento a cualquier pregunta que ustedes tengan”, dijo el Presidente a la prensa que estaba presente. 

La instrucción desde el equipo comunicacional presidencial, sin embargo, era diferente. A los periodistas se le informó que iban a tener la posibilidad de hacer sólo tres preguntas respecto al caso Monsalve, lo que finalmente no fue así; el mandatario estuvo hablando 55 en conferencia y más de 40 respondiendo los requerimientos de la prensa. 

Fue así como llegó la primera polémica del punto de prensa. Ante la pregunta sobre si tenía conocimiento sobre la gestión de Monsalve para recabar las cámaras del hotel en que habrían sucedido los hechos que se le imputan, Boirc reconoció que el ex subsecretario se lo confirmó durante la reunión que mantuvieron el martes de esta semana en que se discutió el tema.  

“El subsecretario Monsalve me comentó el martes en la noche que él había revisado las cámaras del hotel (...) Si hubo alteración de pruebas u obstrucción a la justicia, no tengo ningún conocimiento de aquello”, precisó el jefe de Estado. 

Luego de dos preguntas, dos periodistas de la localidad intentaron consultarle sobre iniciativas del gobierno en materia de seguridad, educación y salud para la comuna. El mandatario, sin embargo, no quiso referirse a otro tema que no fuera la denuncia contra su ex subsecretario del Interior. 

Las cabos sueltos en la versión de Boric

En su declaración al principio de la conferencia el mandatario sostuvo que conoció la denuncia en la tarde noche del martes de esta semana a través de la ministra Tohá. En esa línea, el mandatario dijo que citó de inmediato a Monsalve a su despacho, y que éste le aseguró no estar en conocimiento de la acción judicial en su contra. 

Boric prosiguió detallando lo que habría conversado con el exsubsecretario esa noche, mencionando que lo instó a ponerse a disposición del Ministerio Público y la Policía de Investigaciones. “Esa misma noche, el subsecretario entrega su celular a la PDI”, dijo Boric enfatizando en que conoció sólo la denuncia pero no su contenido. 

Sobre la renuncia, el mandatario aseguró que lo citó al día siguiente para solicitarle la renuncia y que esta fue presentada el día jueves. 

Sin embargo, al correr de las preguntas, el Presidente fue dando más detalles —a veces contradictorios— sobre cómo se tomó la decisión de removerlo. Por ejemplo, en un momento sostuvo que se le había comunicado a Monsalve que su cargo estaba en evaluación, pero que se requerían más antecedentes para tomar la decisión final.

“Hoy sabemos que las tareas de su cargo eran incompatibles (con el proceder de la investigación). Eso el martes en la noche yo no lo tenía claro, el miércoles se recabaron los antecedentes y el jueves presenta su renuncia”, acotó el mandatario. 

Y agregó: “Si no hubiese salido en la prensa, sin lugar a dudas igual hubiese salido (del cargo). Acá, ni la ministra Tohá ni yo queríamos esconder esto, ni queríamos que se escondiera”. 

En otro momento, Boric aseguró que no fue por la publicación de la prensa que se le pidió la renuncia, pero luego sostuvo que la renuncia se la solicitó el jueves a las 14:00, hora en que el caso ya había estallado en los medios. 

Ante esto, se le requirió para que aclarase el punto, a lo cual Boric contestó: “El martes en la noche conversé con él y le dije que en función de los antecedentes que se recaben de esta denuncia que no conocíamos, íbamos a evaluar su continuidad en el cargo. El jueves el subsecretario llega al Parlamento, apenas termina se dirige a La Moneda. En la primera comunicación que tengo con el subsecretario Monsalve el jueves queda clara su renuncia”. 

No obstante, el ex subsecretario esa jornada estuvo en la subcomisión de presupuesto defendiendo la partida de la repartición que dirigía. Boric, sobre esto, contestó que el hecho se debía a la relación “tensa” que mantiene el gobierno con el Congreso y que se envió al subsecretario para no perjudicar la tramitación del presupuesto en seguridad. 

Eso sí, deslizó una autocrítica: “Se podría haber de otra manera, eso es algo que se puede evaluar. Es bueno que todos, a partir de esto, reflexionemos sobre qué se pudo haber hecho mejor. Quizás hacerlo (la renuncia) un par de horas antes, o se pudo hablar en la mañana”.

Encontrón con jefa de prensa

A medida que avanzaba la ronda de preguntas, la jefa de comunicaciones del Presidente, Nicole Vergara, comenzó a inquietarse. De estar a un costado se posicionó en cuclillas frente al presidente. “Ya es suficiente, ya ha respondido muchas preguntas”, le repitió Vergara a Boric en al menos tres ocasiones. 

La primera vez el Presidente reaccionó con calma. Le dijo “voy a contestar todas las preguntas”. En la segunda ocasión, le contestó: “No, no es suficiente, voy a contestar todo”, y ya en la tercera, Boric se movió a un costado del podio y reprendió a su jefa de prensa lo que fue captado por las cámaras de televisión y asistentes. 

Además del impasse, hubo otra polémica; ante la negativa del Presidente Boric a dar por terminada la ronda de preguntas, otro miembro del equipo de comunicaciones, Mario Arriagada, retiró el micrófono a los periodistas presentes para contener la situación. 

“¿Quién le sacó el micrófono?”, le preguntó Boric a la periodista que le comunicó la situación mientras hacía una pregunta.

En otro momento, el micrófono fue desconectado, pero de igual forma el Presidente siguió respondiendo las preguntas instruyendo a su equipo a que se restableciera el audio.

Crisis en lo más profundo de La Moneda

Consultados por El Desconcierto, distintos funcionarios de gobierno se declararon “consternados” y “preocupados” tras el punto de prensa por el Presidente. ¿La razón? Todos coinciden en que “no fue atinada” la decisión del mandatario referirse en extenso al caso, debido a los pocos antecedentes y que se había hecho público pocos minutos antes que comenzara a hablar. 

De hecho, a los pocos minutos de que terminara el punto de prensa, la banda de la UDI anunció que solicitó a la Fiscalía que se cite a declarar en la causa por una eventual “omisión de denuncia” respecto al hecho de que Monsalve mandó a revisar las cámaras. 

“Si efectivamente el exsubsecretario Monsalve le reconoció al Presidente Boric que personalmente había revisado las cámaras del hotel donde supuestamente estuvo con la denunciante, lo que correspondía entonces es que el Mandatario presentara estos antecedentes ante la Fiscalía, tal como se le exige a cualquier funcionario público, que tiene el deber de denunciar un delito”, sostuvo el jefe de bancada UDI, Gustavo Benavente. 

Pero las críticas no se concentraron sólo en la oposición, desde el mismo oficialismo también se plantearon críticas al manejo de la situación del gobierno. 

“Más allá de que el ex subsecretario Monsalve salió del gobierno, lo cual es correcto, acá hubo una serie de graves errores políticos en el proceso de toma de decisiones. No se tomó la decisión en el momento mismo en que se conoció la denuncia. Se dio espacio para que eventualmente se utilice ese cargo de poder para beneficiarse en la investigación y eso es algo que es grave. No hay que bajarle el perfil, acá hay que asumir el error y por cierto tendrán que evaluarse las responsabilidades políticas”, dijo el diputado Raúl Soto (PPD).