El Valle del Makhrour, situado en Cisjordania y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, enfrenta la amenaza avance de colonos israelíes en territorio palestino. Esto luego de que Israel anunciara la construcción de un nuevo asentamiento llamado "Nahal Heletz" en terrenos de Beit Jala, específicamente en esta zona donde aproximadamente el 60% de las parcelas agrícolas tienen como propietarios a ciudadanos chilenos.

La conexión con Chile es de larga data. Sin ir más lejos, se estima que en Chile residen más de medio millón de personas de origen palestino, de los cuales cerca del 40% proviene de Beit Jala. Una estrecha relación que explica la alta proporción de propiedades en manos de chilenos en la zona del Valle de Makhrour.

Relación de Chile con el Makhrour

Isidora Khamis, chilena de origen palestino que visitó la zona en 2019, ofrece una perspectiva personal sobre esta conexión: "Hay muchos territorios de chilenos-palestinos en la zona. De hecho, mi bisabuelo, que es Yadal Lajamiz, es Camis, vino a Chile en 1907, trabajó para juntar plata y volvió a Palestina. Compró todos estos terrenos que tenemos en base al trabajo que hizo acá en Chile".

Esta historia de Khamis es representativa de muchas familias chileno-palestinas. La conexión se remonta a principios del siglo XX, cuando un gran número de palestinos emigraron a Chile en busca de oportunidades económicas.

Muchos de ellos, como el bisabuelo de Khamis, regresaron a Palestina para invertir en tierras, estableciendo así un vínculo transgeneracional que persiste hasta el día de hoy.

Zona agrícola reconocida por la Unesco

El Valle de Makhrour, objeto de esta controversia, es reconocido por la UNESCO debido a "su sistema tradicional de terrazas y acequias, que ha permitido la agricultura de secano y regadío en una zona de terreno montañoso". Este reconocimiento subraya la importancia cultural y agrícola de la región, que ha mantenido sus prácticas tradicionales durante siglos.

Khamis describe vívidamente el valle: "Sigue siendo un valle agrícola. De hecho, no sé cómo podría imaginárselo, pero es tierra y pasto, es hermoso. Las construcciones, como la casa de mi abuelo sigue siendo de piedra, como era originalmente".

Sin embargo, esta herencia cultural y familiar se encuentra ahora bajo amenaza. La Administración Civil israelí ha designado formalmente unas 60 hectáreas de tierra para la nueva colonia de Nahal Heletz, ubicada al suroeste de Jerusalén y al oeste de Belén. Esta decisión, anunciada a mediados de agosto, marca el establecimiento del primer asentamiento nuevo en Cisjordania desde 2017.

La situación en Cisjordania se ha vuelto cada vez más tensa, como lo confirma el senador Francisco Chahuán (RN) en una entrevista reciente con El Desconcierto. Existe "la voluntad del gobierno israelí de extender los asentamientos, particularmente respecto de Beit Jala, afectando también a ciudadanos chilenos que tienen familia y propiedades en la zona. Se está provocando un asedio a la población civil. Se han producido más de 400 detenciones arbitrarias por parte del gobierno israelí, solo en Cisjordania y en Jerusalén Oriental", aseguró.

Las palabras del senador Chahuán refleja que no solo se trata de un conflicto en medio oriente, sino de una crisis que afecta directamente a ciudadanos chilenos y a su patrimonio familiar.

Khamis, por su parte, relata cómo la situación ha empeorado en los últimos años: "Cuando fui en el 2019, empezaron a llegar más colonos justamente en este año que empiezan a expulsar a los palestinos. Era muy fuerte. Me acuerdo que fui en un taxi, jamás hubiese podido llegar, de hecho, si no hubiese sido en un taxi" debido a la cantidad de controles que dividen la zona palestina.

Violación a la Cuarta Convención de Ginebra

La expansión de colonias en el Territorio Palestino Ocupado no es solo un problema local. Constituye una violación de la Cuarta Convención de Ginebra y es considerada un crimen de guerra según el derecho internacional. Esta situación plantea desafíos significativos para las relaciones diplomáticas entre Chile e Israel, dado el impacto directo sobre ciudadanos chilenos y el daño al patrimonio cultural de la humanidad.

"Es súper importante como que la expansión de todo tipo de colonias en Israel, en el territorio palestino, todas, todas, están constituyendo una violación a la Cuarta Convención de Ginebra. Y también es considerado un crimen de guerra", enfatiza Khamis.