Fiebre del litio en Sudamérica: Chile lidera, pero Bolivia gana terreno con Rusia como socio clave
El litio, denominado "oro blanco" por su creciente importancia en la transición energética global, está experimentando una redistribución de fuerzas en Sudamérica. Chile, que produjo 270,947 toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE) en 2023, mantiene su posición como el principal productor en la región, a pesar de que su participación en el mercado mundial se ha reducido del 40% en la década de 2000 al 24% en la actualidad, según datos del Ministerio de Minería de Chile.
Este declive relativo contrasta con el ascenso de Australia, que ahora domina el 47% de la producción global, y la emergencia de Bolivia y Argentina como actores prometedores en el escenario del litio.
Bolivia, que asegura albergar el 30% de las reservas mundiales en sus vastos salares, está captando la atención de potencias como Rusia, China e India, atraídas por la facilidad de extracción y los bajos costos operativos.
El panorama chileno del litio
El Ministerio de Minería reportó que en 2023 las exportaciones de litio alcanzaron US$7.823 millones, registrando un descenso del 4% en relación con 2022. Para los primeros cinco meses de 2024, los envíos acumulan US$1.590 millones, evidenciando una disminución del 65% respecto al mismo período del año anterior, en consonancia con la desaceleración del precio del litio en los mercados internacionales.
A pesar del momento de desaceleración del precio, Chile posee el 34% de las reservas mundiales de litio, y el presupuesto de exploración en el país alcanzó los US$25,7 millones en 2023.
En este contexto, SQM se encuentra construyendo una planta de refinación de carbonato de litio para 40.000 toneladas, que permitirá alcanzar los estándares chinos que comenzaron a regir en julio de 2024. Esta nueva planta cumplirá con estándares de calidad a nivel global para 2026, en la búsqueda de mejorar sus sistemas de producción para alcanzar una tasa de 240 mil toneladas de carbonato de litio.
Proyecciones futuras en mercado del litio
Para 2024 y 2025, Chile proyecta una producción de 275,000 y 285,000 toneladas de LCE respectivamente, manteniendo su posición como el principal productor en Sudamérica y el segundo a nivel mundial, detrás de Australia.
En este contexto, el gobierno de Gabriel Boric puso en marcha la Estrategia Nacional del Litio, fortalecer su incidencia en el mercado internacional a través de la colaboración público-privada.
El ascenso de Bolivia y Argentina en el mercado del litio
Por otro lado, Bolivia busca volverse en actor competitivo con sus importantes reservas de litio que hasta el momento no han explotado al ritmo de Chile. Recientemente, la empresa rusa Uranium One Group firmó un contrato con Yacimientos de Litio Bolivianos (YLB) para construir una planta de extracción directa y carbonatación de litio en el Salar de Uyuni, con una inversión superior a los 950 millones de dólares. Se espera que esta planta produzca 14.000 toneladas anuales del mineral.
Bolivia proyecta incrementar su producción diaria de 3 a 13 toneladas. Aunque esta cifra es significativamente menor que la de Chile, el país altiplánico está atrayendo inversiones millonarias y se estima que posee 23 millones de toneladas de litio en reservas en el Salar de Uyuni.
Asimismo, Bolivia ha cerrado acuerdos con compañías chinas como CATL BRUNP & MOC (CBC) y Citic Guoan para el diseño y construcción de plantas de carbonato de litio, y con la firma india Altimin para desarrollar tecnología en la fabricación de baterías de ion de litio.
Argentina emerge como el tercer actor relevante en la carrera del litio sudamericano. En 2023, el país produjo entre 65,000 y 70,000 toneladas de carbonato de litio. Con la reciente inauguración de nuevas plantas, se espera que la capacidad instalada alcance 136,500 toneladas anuales. Para 2024, se prevé que nuevos proyectos aporten un total adicional de 25.000 toneladas de litio.