A partir de la Estrategia Nacional del Litio presentada por el Gobierno, 23 salares del país quedaron abiertos a la extracción de este mineral. Dentro de ellos, 8 están bajo alguna categoría de protección según la Ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas.

Esto es lo que alertaron especialistas de las fundaciones Symbiotica y Chile Sustentable ante la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados durante los últimos días.

Tres de estos salares, Atacama, Maricunga y Pedernales, son salares estratégicos asignados a Codelco. Los cinco restantes, Surire, Ascotán, Llamara, Bellavista Pintados y Punta Negra, han sido abiertos a la explotación por empresas privadas.

Todos estos salares están total o parcialmente protegidos por ley, como  Parque Nacional, Reserva Nacional, Monumento Natural, Sitio Ramsar o Sitio Prioritario

En el caso de los salares que son Sitios Prioritarios, el Gobierno está en un proceso de evaluación durante dos años para definir cuales de ellos van a quedar protegidos oficialmente por la ley de Biodiversidad.

Este proceso incluye consultas ciudadanas y procesos participativos que, según alertan desde las organizaciones, de nada sirven si el Estado ya ofreció estos salares para explotar.

Desde Chile Sustentable, María Isabel Manzur subrayó la contradicción de proteger parte de un salar y explotar otra, “dado que dicha explotación afecta inevitablemente a todo el salar”.

Por su parte, la Fundación Symbiotica abordó la situación de los flamencos, especies indicadoras de la salud de los salares. Dominique Durand explicó que “las tres especies de flamencos en Chile dependen de diversos cuerpos de agua como salares, estuarios, bofedales y lagunas, y requieren salares específicos para alimentarse, reproducirse y descansar”.

Daño ambiental

Desde el mundo científico se ha criticado en varias ocasiones el avance que se ha dado a la industria del litio sin que exista mayor conocimiento sobre el estado de los salares y el impacto que tendrán los métodos de extracción.

Es el caso de la científica nortina Cristina Dorador, que ha declarado que la extracción directa (que se propone como método más amigable con el medio ambiente) no ha sido probada a escala industrial.

Además, en el país ya existe una experiencia de largo plazo de extracción de litio que es la que realiza SQM en el Salar de Atacama, donde se ha constatado en estudios el cambio en el clima local que ha generado la actividad, aumentando la temperatura del suelo, disminuyendo la humedad de este y afectando la cobertura vegetal.

 Foto: Agencia UNO.