Evelyn Matthei (UDI) sigue liderando la carrera presidencial. Según la última encuesta Cadem, la alcaldesa de Providencia anotó un alza de cinco puntos en la intención espontánea de voto llegando al 26% mirando desde lejos a Michelle Bachelet (11%) y José Antonio Kast (9%). 

Los resultados de la medición llamaron la atención en el espectro político en función del hecho que ha cruzado la contingencia las últimas semanas: el Caso Hermosilla. 

En medio de la formalización de cargos del abogado y posterior a que se le decretó prisión preventiva, múltiples chats de Luis Hermosilla fueron revelados. En ellos, un factor común emergió a la vista; la implicación de personeros UDI en las redes del influyente abogado de La Plaza.

El más destacado —y dañado por el escándalo— ha sido el exministro del Interior, Andrés Chadwick, quien ha estado en el centro de la polémica por las constantes menciones que hacía Hermosilla de él en los chats en que coordinaba favores con altas autoridades como la ministra de la Suprema, Ángela Vivanco, el exdirector de la PDI, Sergio Muñoz o incluso con los Jalaf. 

Asimismo, el exministro de Vivienda, Felipe Ward (también militante UDI) salió a la palestra luego de Ciper revelara que desde su equipo se realizaron presiones a la Seremi de Vivienda de la Región Metropolitana para favorecer un proyecto inmobiliario del Grupo Patio ligado a Hermosilla. 

¿Pero por qué la UDI no se ha visto afectada por el Caso Hermosilla? Según Cadem, el partido gremialista aparece en el cuarto lugar ante la pregunta sobre a quién “afecta negativamente el Caso Audio”.

De hecho, el Poder Judicial, el gobierno y la fiscalía figuran antes que la UDI. 

¿Por qué no se ha visto afectada Matthei

La alcaldesa, ante los constantes cuestionamientos, ha blindado a Chadwick, pero dejando entreabierta la puerta de un posible descuelgue: “Esto tiene que ser caiga quien caiga”, ha dicho la abanderada de Chile Vamos. 

Respecto al porqué Matthei no ha visto mermada su buena imagen ante la ciudadanía, Rodolfo Disi, académico de la Escuela de Gobierno de la UAI, señala que Matthei “aunque tienen un componente partidista, también es un liderazgo asociado directamente a su persona. Eso ha sido reforzado en los últimos años por su posición como alcaldesa, que es un tipo de liderazgo que tiende a ser más personalista. Es por eso que el caso Audios no la estaría afectando directamente, a pesar de lo que pasa con la UDI”. 

Marcelo Santos, académico de la Universidad Diego Portales e investigador del Núcleo Milenio MEPOP, hace hincapié en la importancia del “silencio” que ha guardado Matthei sobre el Caso Hermosilla sobre el cuál ha evitado profundizar.

“En términos de estrategia de Evelyn Matthei está haciendo lo correcto, que es evitar hablar del tema, porque lo cierto es que no le favorece. Lo que se percibe es que ha tratado de desmarcarse, lo que es complejo ya que está cercada por todos lados. En definitiva, lo que ha hecho es hacer de la omisión su estrategia. En ese contexto, son ahí sus adversarios políticos  quienes deben decidir si insisten o no en que el tema se explote de forma política”, sostiene Santos a El Desconcierto. 

El delicado momento de la abanderada

Pese a que la alcaldesa se ha mantenido fuerte en los sondeos de opinión, ambos expertos coinciden en que la variabilidad del tema y la posibilidad de que surjan nuevos antecedentes hacen que sea imposible descartar que en algún determinado momento el escándalo termine afectando a Matthei y sus aspiraciones presidenciales. 

“Hay un poco de apuro por hacer diagnósticos cuando este tipo de casos suelen tener efectos a más largo plazo. Como vaya decantando esto depende del encuadre que se va dando en los medios y por cuánto tiempo persiste la temática sigue en la pauta. Y eso con el tiempo puede ser perjudicial para Evelyn Matthei”, sostiene Santos que hace hincapié en que een el tiempo de campaña es cuando se puede ver más perjudicada la abanderada de la UDI: “Cuando llegue el momento de los debates, de enfrentar la evidencia disponible, ahí probablemente van a aparecer cuestionamientos más duros”.

Disi, en tanto, plantea que “puede ser que falte un poco de tiempo para que la opinión pública haga la asociación entre ella, su partido y el caso”, y que “también depende de si ella decide tener una postura menos distante o si empieza a referirse a él más extensamente”.

En ese sentido, el académico asegura que “la UDI podría pagar los costos políticos (por ejemplo, electorales) a medida que se conozca más del Caso. Por otro lado, ventilar potenciales discusiones y conflictos internos por el caso a la prensa y la opinión pública sería contraproducente”.