A pedido de la bancada de diputados de Renovación Nacional (RN) en abril de este año se constituyó la Comisión Investigadora (CEI) por la situación de los Servicios de Educación Locales (SLEPS). 

En ese entonces, cuando el año escolar había iniciado hace unas semanas, se conoció que alrededor de ocho mil estudiantes no habían sido matriculados sólo en la Región de Atacama, situación que se sumó a un informe del Mineduc —dado a conocer por este medio— que detectó en septiembre del años pasado traspasos por más de 44 mil millones de pesos sin respaldo y el pago irregular a funcionarios con recursos de la subvención escolar en el SLEP de dicha región. 

Sin embargo, pese a las críticas que se levantaron desde la derecha, en la comisión investigadora se aprobó un informe favorable a la implementación de los Servicios Locales de Educación. 

¿El motivo? La derecha no logró conseguir los votos para aprobar el informe que elaboraron los diputados del sector que integraron la comisión, el cual cuestionaba duramente la política que fue impulsada por el gobierno de la ex presidenta Bachelet. 

Informes contrapuestos

A la última sesión de la CEI cada sector llegó con su propio informe de conclusiones, por lo que se procedió a votarlos por separado. 

El de la oposición, por ejemplo, planteaba que “el sistema de admisión escolar (SAE) continúa arrojando año a año resultados perjudiciales para apoderados y familias, vulnerando así el derecho a la educación de niños y adolescentes” o que “la implementación del nuevo sistema de educación pública (SEP) y de los servicios locales de educación pública (SLEP) da cuenta de errores de diseño que han obstaculizado fuertemente su desarrollo”.

A favor del informe de dicho informe, votaron los diputados del sector Marcia Raphael (RN) —presidenta del CEI—, Eduardo Cornejo (UDI) y Sara Concha (PSC), mientras que el oficialismo votó en contra. 

Por el contrario, el informe aprobado por la CEI señala que “afirmar que el SAE es responsable de las dificultades que han existido con la cobertura de matrícula es un error. El número limitado de matrículas en algunos establecimientos frente a una mayor demanda no es un problema del SAE (que, por el contrario, ha permitido identificarlo), sino de disponibilidad de cupos de los establecimientos, lo que afecta a comunas y niveles específicos”, mientras que de los SLEP se destaca el “alza en los rendimientos” en el SIMCE, la estructura educativa, los mayores niveles de retención, entre otros aspectos. 

Y pese a los votos en contra de la oposición, dicho informe favorable respecto al SAE y los SLEP fue aprobado debido a la mayoría oficialista presente en la comisión.

La diputada Joanna Pérez (Demócratas), que se abstuvo en ambas votaciones, dio cuenta en su intervención de la lejanía entre ambas posturas: “Yo sé que esta comisión ha intentado hacer el mejor trabajo posible y creo que en buena parte lo ha logrado, pero tener dos informes contrapuestos no es el mejor de los trabajos. Porque lo que uno hace es dar recomendaciones, sin embargo, es muy blando, que es el del oficialismo, y otro que es solo críticas y no genera propuestas (el de la oposición)”, sostuvo la parlamentaria. 

Ausencias y recriminaciones internas en la derecha

La derrota en la comisión supuso un duro golpe para la derecha, en particular para Chile Vamos, sector que lleva tiempo cuestionando la reforma educativa impulsada en el gobierno de Bachelet. 

Sin embargo, en el sector reconocen que el resultado de la votación se debió a un error propio: diputados se ausentaron de la comisión sin establecer un reemplazo. 

“Aquí hay una autocrítica, y una conversación pendiente con aquellos que no asistieron. Uno puede entender que por un motivo u otro no se asista. Pero también existe el sistema de reemplazo. O sea, podrían haber mandado a un diputado que lo reemplazara. Lamentablemente, creo que nos faltó comunicación”, asegura la diputada Raphael, una de las tres parlamentarias que de oposición que estuvo presente. 

Los diputados de oposición ausentes fueron Stephan Schubert (Partido Republicano), quien tenía justificada su inasistencia,  Sergio Bobadilla (UDI), y Hugo Rey (RN). 

Este último fue uno de los más cuestionados en la interna de su bancada por no dar previo aviso de su inasistencia y tampoco determinar un reemplazo.