Una ciudadana venezolana que había sido ordenada a abandonar Chile recibió un giro favorable en su situación después de que la Corte Suprema anuló una decisión anterior que negaba su solicitud de residencia definitiva.

Este caso comenzó cuando el Servicio Nacional de Migraciones decidió que ella debía salir de Chile porque no había demostrado el pago de una multa, lo que afectaba su proceso para quedarse permanentemente en el país.

La mujer, que ha vivido en Chile por más de cinco años y tiene familia y trabajo aquí, presentó un recurso de amparo a través de sus representantes legales, argumentando que no se le dio la oportunidad de explicar su situación o de defenderse adecuadamente.

El tribunal superior estuvo de acuerdo con ella, diciendo que el proceso no fue justo ni razonable.

Los jueces de la Segunda Sala de la Corte Suprema, Manuel Antonio Valderrama, Leopoldo Llanos, Jean Pierre Matus, María Cristina Gajardo y la abogada Leonor Etcheberry, decidieron que la decisión de expulsarla no tenía suficiente base legal y no consideraba su integración a la sociedad chilena ni su situación personal.

Por lo tanto, revocaron la decisión inicial y ordenaron al Servicio Nacional de Migraciones darle a la mujer otros 30 días para que presente pruebas de que cumple con los requisitos para quedarse en Chile.