Kamala Harris y sus desafíos: Seguridad, migración, aborto, medioambiente y crédito estudiantil
Cien millones de dólares, la mejor recaudación en la historia del partido. Eso fue lo que logró amasar en tan solo dos días la vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris, para su incipiente y recién anunciada campaña en el marco de las elecciones presidenciales de este año en el país norteamericano.
La nueva candidata oficial del Partido Demócrata para liderar la Casa Blanca ascendió luego del anuncio del actual mandatario estadounidense, Joe Biden, que fue duramente cuestionado por su estado de salud y por lo mismo decidió retirarse de la contienda.
Pero Harris no tiene un camino fácil, ya que todo indicaría que el que corre con ventaja es el expresidente republicano Donald Trump, que hace una semana sufrió de un atentado que lo dejó con una herida de roce de bala en su oreja. Esto último, aseguran los análisis, le valdría aún más la simpatía de los electores.
No obstante, tras las críticas a las capacidades de Biden por su edad, la primera mujer vicepresidenta de Estados Unidos aparece como una de las cartas con mayores probabilidades de estrechar los puntos porcentuales que separan a los demócratas de Trump en las encuestas.
El analista internacional de la Universidad de Chile, Gilberto Aranda, explicó a El Desconcierto los desafíos que enfrenta la también abogada del ala más moderada del Democratic Party en su camino a los comicios de noviembre, y plantea que está en la mejor posición para asumir la candidatura de su partido.
Convencer a los estados bisagra
"Kamala Harris tiene el respaldo y fue ungida por el presidente en funciones, Joe Biden, y eso le da un tremendo espaldarazo. Ha conseguido una cantidad enorme de dinero en tiempo récord, en 24 horas, y además gran parte del liderazgo del Partido Demócrata la ha consagrado (...) ya tiene el número mínimo delegados para ser elegida", dijo el experto en materia internacional, Gilberto Aranda.
Además, comentó que la candidata demócrata está a muy poco en margen de diferencia respecto de Trump.
"Ciertamente después del atentado quedó consolidada su figura, y la convención republicana fue una fiesta para aclamarlo (al expresidente Donald Trump), pero yo diría que por encuestas la diferencia no es inalcanzable".
"El tema es que en Estados Unidos, como sabemos todos y todas, la elección no es directa por sufragio popular sino que se eligen electores. Y están los swing states, o en español, "estados pendulares u oscilantes" porque son estados que cambian a menudo", puntualizó.
"El que gana en un estado se lleva todos los electores, no importa que haya ganado por un punto o por dos votos, se lleva a todos los electores del estado. Estos son, entre otros, Georgia, Nevada, Arizona, Florida y sobre todo Ohio, Pensilvania, Michigan o Wisconsin", detalló Aranda.
A su juicio, ahí es donde Harris tiene el mayor desafío de campaña "porque aparentemente la mayor parte de esos estados hoy día estarían dándole una victoria bien clara a Trump aún cuando al final sea escaso el margen (...) van a ser esos estados pendulares los que van a decir quién gana".
Buen compañero de fórmula
El analista internacional también destacó su respaldo a demandas como el aborto a nivel federal, un nuevo pacto medioambiental y el alivio a la deuda por créditos estudiantiles, pero expone que debe hacer un gran trabajo a la interna para convencer a los demócratas más a la derecha.
"¿Trump ganó ya la carrera? No, esa carrera falta hacerla, pero está muy bien aspectada para ganarla (...) tiene que hacer una campaña directa para apelar básicamente al electorado promedio que no necesariamente está en una tienda política inscrito", agregó.
El experto de la Universidad de Chile manifestó que, al mismo tiempo, no debe divorciarse de las bases del sector moderado del Partido Demócrata: tendría que escoger un buen compañero de fórmula que la complemente para ocupar la vicepresidencia.
"Tiene una plataforma bien interesante, tiene una identidad. Ella es afroamericana, segunda mujer afroamericana en llegar al Senado en la historia de Estados Unidos, y por lo tanto hay algunos de estos estados pendulares, como Georgia, que tienen una cantidad muy importante de afroamericanos que ya la tienen de símbolo", añadió.
Demandas históricas y urgencias ciudadanas
Pero, sostiene, sería también importante que Kamala Harris sepa conjugar las demandas que ella siempre ha defendido desde el Senado y ahora la Vicepresidencia.
"Uno de ellos es derechos reproductivos de la mujer, aborto sin restricciones por parte de los estados (...) Dos, el tema ecológico, New Green Deal. Es decir, un nuevo trato ecológico. Y tres, el tema del alivio a la deuda universitaria juvenil", enumeró el analista.
"El tema es cómo lo conjuga con otros temas que son también importantes para el ciudadano promedio, como seguridad en las grandes ciudades y el tema migratorio (...) Ella además fue fiscal general de California, así que conoce el tema", explicó.
Con todo, el académico puso énfasis en que la delincuencia urbana y la cuestión migratoria son flancos abiertos para la candidata, porque como vicepresidenta ha estado a cargo de la situación en las fronteras y la problemática no pudo ser contenida del todo en los límites con Guatemala, El Salvador, Honduras y México.
"¿Cuál debería ser la estrategia? Bueno, no renunciar a su plataforma, mantener sus temas históricos. Pero también conjugarlos con otros temas que pueden ser menos estelares para su partido pero que son importantes para el estadounidense promedio (...) Si no, se lo dejan como nicho al adversario", concluyó.