La indignación de los futuros docentes

La indignación de los futuros docentes

Por: El Desconcierto | 12.06.2024
Urge promover la formación de nuevos profesores, ante lo cual tenemos que volver a hablar de gratuidad de la educación superior. Gratuidad y becas de mantenimiento que, por lo demás, se retribuye con años de servicio en el sector público.

En Chile faltan docentes. Esta afirmación ha sido difundida extensamente por académicos, medios de comunicación, políticos, instituciones educativas y por los propios docentes. Las cifras son desoladoras: la matrícula de primer año en carreras de pedagogía en Chile cayó de 20.919 en el 2018 a 12.484 en 2022 (Fuente: CNED 2023, Índices Educación Superior - Pregrado). Asimismo, las conclusiones de EligeEducar para el año 2025 es que existirá un déficit de 32.000 docentes en todos los niveles educacionales.

[Te puede interesar] ¿Reforma electoral solapada?: Proyecto de elección en dos días abre posibilidad de cambios al sistema

Esta carencia, sin embargo, es invisible ante los ojos de quienes elaboran y ejecutan las políticas públicas. Con suma urgencia y prioridad, la última cuenta del presidente Gabriel Boric, otrora dirigente estudiantil, anunció entusiastamente mayor financiamiento para seguridad, con el fin de enfrentar el flagelo del narcotráfico y de la delincuencia. Pese a ello, los anuncios educativos escasearon.

Nos preguntamos: ¿cómo afrontar el problema de la seguridad pública sin profesores debidamente capacitados? ¿Por qué atacar el problema de la delincuencia solo de manera superflua y no desde lo íntegro?

A la fecha existen 227.000 niños que se encuentran fuera del sistema escolar, esto es, sin el derecho básico a educarse. Las trayectorias de vida de muchos niños y adolescentes los dejan vulnerables a la explotación por parte del narcotráfico. Los profesores son un eslabón clave para ayudar a disminuir esta cifra y prevenir nuevas deserciones.

Frente a la escasez de docentes y el pronto abandono que hacen del sistema educacional, resulta imperante la formación de nuevos profesores. Pese a esto, decenas de estudiantes a nivel nacional no recibieron la Beca Vocación de Profesor 2024 en su tercer estrato para Licenciados y Profesionales (BVP de aquí en adelante), creada precisamente para solventar esta carencia.

El problema de fondo es que las anticuadas recetas neoliberales de focalización del gasto social no responden a las verdaderas necesidades educativas de las grandes mayorías. Las becas, que han servido hasta ahora como paliativo a las movilizaciones estudiantiles que exigieron la gratuidad total de la educación superior y cuestionaron el modelo de mercado, vuelven a mostrar su límite.

Los requisitos para optar a becas siempre han sido motivo de estrés para cientos de miles de estudiantes y familias trabajadoras. Lo cuestionable y criticable de este caso es que la BVP para Profesionales y Licenciados exige un título de Licenciatura o afines y estar matriculado en una universidad adscrita al sistema, pero cuyos cupos son limitados.

No es cualquier beca, es una beca dirigida a quienes ya ejercen la docencia, muchos de ellos en establecimientos que reciben financiamiento estatal, debilitando aún más la educación pública. Hay un duro impacto subjetivo para profesores en ejercicio y para futuros profesores que buscan, a través de la Beca Vocación Profesor para Profesionales, perfeccionarse.

[Te puede interesar] La ONU es lapidaria: Franja de Gaza es la más peligrosa para la ayuda humanitaria

Un Licenciado o Licenciada, para hacer clases en un colegio tiene que ser “habilitado” por el establecimiento, por tanto es altísimo el riesgo de no asegurar la formación docente de cada uno de los profesionales que se encuentra en las aulas de los diferentes liceos y colegios del país, pues, al cabo de unos años, dicha habilitación vence. Se trata de no apostar por la formación docente, se trata del peligro inminente de nuevas deserciones, profundizando la escasez de profesores en Chile. Y esta vez el único responsable es el Estado.

A esta situación se suman las penurias personales: miedo a quedar desempleado por no obtener la pedagogía e imposibilidad de pagar los millonarios aranceles con un sueldo docente que no alcanza a fin de mes. Mientras muchos estudiantes de pedagogía no reciben la prometida Beca Vocación de Profesor, los intereses siguen aumentando, amenazando con seguir engrosando las cifras de deserción.

El Ministerio de Educación no sólo anunció tarde a decenas de estudiantes a nivel nacional que la Beca no sería otorgada, sino que incumplió las propias bases del beneficio en las cuales se leía que el único requisito era poseer un grado de licenciado y pertenecer a una institución adherida al beneficio, limitándose a cambiar las bases posteriormente al anuncio de los resultados, dejando desamparados a cientos de profesionales y licenciados.

Temerosos de que la rabia e impotencia de decenas de estudiantes de pedagogía se transformara en organización y en movilizaciones, entre gallos y medianoche, cambiaron la descripción de la página. Desde esta semana, el MINEDUC aclara que el beneficio está sujeto a cupos y establece una serie de criterios para optar.

El día jueves 6 de junio, decenas de estudiantes pertenecientes a las carreras de continuidad de estudios pedagógicos de la Universidad de Chile, Universidad Alberto Hurtado y Universidad del Desarrollo se movilizaron hacia las puertas del Ministerio a exigir una respuesta y una solución. Al día siguiente, viernes 7 de junio, se entregó una carta, cuya respuesta hasta el día de hoy esperamos.

Para revertir la crítica situación de falta de docentes, lo mínimo indispensable es asegurar que quienes hoy se encuentran en el aula estén debidamente capacitados, otorgando el financiamiento total de la formación a quienes se encuentran en calidad de habilitados.

[Te puede interesar] La política y el crimen organizado: Las respuestas de la izquierda y la derecha

A la vez, urge promover la formación de nuevos profesores, ante lo cual tenemos que volver a hablar de gratuidad de la educación superior. Gratuidad y becas de mantenimiento que, por lo demás, se retribuye con años de servicio en el sector público.

 

*Aclaración:

El día martes 11 de junio, poco antes de la publicación de esta columna, los estudiantes en cuestión se reunieron con el Mineduc para avanzar en las conversaciones respectivas.