Mamitas del plomo en Arica presentan acción contra el Estado: Reclaman que sigue la contaminación
En la década de los 80’ una empresa sueca pagó a una empresa chilena por deshacerse de residuos tóxicos de la minería en su país. Estos desechos fueron enterrados en Arica cerca de zonas que luego fueron urbanizadas. Ahora, la ONG Mamitas del Plomo demanda al Estado por la contaminación de sus hijos e hijas.
[Te puede interesar] Vertedero sueco en el norte de Chile: los residuos tóxicos que afectan a niños y niñas
Son decenas las personas que viven cerca de este lugar y que padecen cáncer, enfermedades respiratorias crónicas y problemas de desarrollo cognitivo ocasionados por la contaminación. El movimiento ciudadano que se creó para exigir justicia logró en 2012 la aprobación de la Ley de Polimetales.
[Te puede interesar] Asbesto en San Bernardo: Tras 10 años de daño ambiental ordenan retirar escombros peligrosos
Esta ley ofrece seguimiento de salud, apoyo educativo y realojamiento a las familias afectadas, pero excluye a las niñas y niños nacidos después del 2012. Desde la ONG Mamitas del Plomo, han examinado a sus hijos e hijas nacidas luego de la fecha, constatando que también presentan niveles altos de metales pesados en sangre.
[Te puede interesar] Secuestrada con tan solo 3 años por la DINA será indemnizada con $100 millones 49 años después
Por esto presentaron una medida cautelar ante el Tribunal Ambiental por daño ambiental contra el Estado, donde solicitan que se le tomen muestra a las y los niños de la zona nacidos después del 2012, así como al suelo y a la dispersión de los vientos desde el sitio contaminado hacia las viviendas, y que se reconozca el daño que continúa para así tomar medidas de reparación.
Según alegan desde la organización, la remediación ambiental en la zona no ha dado resultados y el sitio contaminado está sin techo ni recubrimientos y funciona como estacionamiento de camiones.
Lissette Rayén, vocera de la organización, comenta que en su familia hay una persona que está dentro de la ley, por lo que se hace estudios constantes de concentración de metales en sangre, y que su concentración ha aumentado desde que comenzó el proceso de saneamiento. “Por eso sabemos que el lugar sigue contaminando”, comenta.
Además de esta medida, las representantes de la organización tienen por principal objetivo que los niños, niñas y adolescentes que nacieron después del 2012 se incluyan dentro de la ley para que puedan obtener el mismo seguimiento y beneficios, ya que también sufren la contaminación.
Ya en el 2021 un grupo de relatores de la ONU visitaron el lugar y urgieron a Suecia y Chile a hacerse cargo de los residuos, y aunque en el gobierno actual se han mostrado abiertos a tomar acciones, aún se está a la espera de una medida concreta.