Las exclusiones y errores conceptuales que trae el Censo 2024 sobre las personas Trans
Frente al fracaso del Censo 2012, un experto asesor del INE dijo “si la estadística no es creíble, no sirve, aunque vengan 30 expertos a decir que los datos están buenos”. Lamentablemente vaticinamos que se repetirá la historia en cuanto a los errores conceptuales y estadísticos que venimos anunciando desde que en 2015 la CASEN hizo la pregunta – En cuanto a su género ¿Usted se identifica cómo? – con opciones de respuestas que luego no se pudieron comparar con las versiones siguientes de la encuesta, tal como lo reconoce el propio MIDESO en su reporte “Serie de Resultados Orientación Sexual e Identidad de Género Encuesta Casen 2022”.
[Te puede interesar] Desigualdad laboral: Desempleo en mujeres pobres llega a 26% mientras que en clase alta a 3%
A pesar de los años que llevamos diciéndole al INE que la forma en que preguntan sexo e identidad de género no es correcta, que hombre y mujer son categorías de identidad de género (no de sexo) que sexo asignado al nacer es masculino o femenino, según como lo registra el Registro Civil, insisten en hacer caso omiso y quedarse con las opiniones de supuestos expertos de los cuales, como siempre, ninguno es trans.
En junio de 2022 el INE nos convocó, junto a varias otras organizaciones de diversidad sexual y de género, a opinar sobre cómo deberían preguntarse en el próximo Censo los temas SOGIESC (Sexual Orientation, Gender Identity, Gender Expression and Sexual Characteristics) resultando en una nutrida serie de opiniones, de las cuales pocas fueron tomadas en cuenta en el cuestionario final.
Es más, preguntas básicas y lógicas sobre estos temas como la Orientación Sexual de la población, fueron simplemente borradas, con el argumento de ser un dato muy sensible que no debería preguntarse en un Censo. Pero ¿no es acaso también la identidad de género un dato sensible? y ¿por qué ni siquiera consideraron hacer la pregunta opcional en caso de sensibilidad de las personas encuestadas?
Son muchas las interrogantes que surgen por este actuar ilógico del INE. Nos preguntamos si realmente saben de qué sirve censar a las comunidades disidentes y diversas, si entienden la importancia de fortalecer las políticas públicas focalizadas en grupos específicos, o qué tipo de políticas públicas se podrían hacer con estos datos, como políticas de educación, salud o cualquier otra. Y puede que muchas personas del INE sí lo entiendan, pero para quienes tomaron la decisión final del cuestionario, claramente no son temas prioritarios.
Por nuestra parte hay preguntas y cuestionamientos que llevamos haciendo muchos años, como por ejemplo ¿Cuál es la mejor forma de preguntar estos temas? ¿Sólo importa la pregunta? o ¿es que es un contexto que requiere que la persona encuestada entienda el concepto y la persona que hace la pregunta sepa qué está preguntando, por si hay dudas por parte de la informante? ¿Cómo se hace cuando no se ha capacitado lo suficiente? ¿Cómo garantizamos que las respuestas sean reflejo de la realidad? ¿Cómo ampliamos la confianza y reducimos la incertidumbre?
[Te puede interesar] VIDEO| Alcalde Carter es sacado a piedrazos de una toma en La Florida: Fue a notificar desalojo
Con toda esta incertidumbre de cómo aplicar la encuesta más importante de Chile, que espera sacar una radiografía a la realidad para hacerse cargo de ella, la decisión del INE de eliminar la pregunta de Orientación Sexual e invisibilizar a todas las personas que no estén casadas o con un vínculo de pareja con la persona jefa de hogar, nos deja sorprendides, y más aún nos impacta la exclusión que hicieron de NNA trans mayores de 14 años, negándoles la posibilidad de declarar su identidad de género en el Censo, en consecuencia que la Ley de Identidad de Género y otras le reconocen.
¿Cuál será el efecto de que las personas trans menores de 18 años no estén incorporadas en el Censo? En todos los casos, el efecto será la invisibilización por toda una década, de una lucha que ya tiene una década de vida.
Con la eventual oleada antiderechos tener datos duros respecto a Diversidades Sexuales y de Género es fundamental para garantizar las políticas públicas en Salud, Educación, Trabajo y Desarrollo Social. Por otra parte, el Censo tampoco se hace cargo de las nuevas realidades jurídicas respecto a las identidades de género; en la pregunta 16 del cuestionario censal 2024 se pide declarar el sexo como hombre o mujer, no en una sino como en tres lugares distintos del cuestionario. Esta pregunta también violenta a las persona no binarias, que no son hombres ni mujeres y que obligatoriamente serán marcadas como hombre o mujer contra su voluntad porque las autoridades del INE así lo quieren y punto. ¿De qué sirve pasar años ante un tribunal si el INE lo elimina de un soplido?
Por otro lado, en las preguntas que son “Sólo para mujeres de 15 años o más” perderemos los datos de todos los hombres trans, transmasculinos y personas no binarias asignadas sexo femenino al nacer, que han sido gestantes de hijos/as/es. Tenemos hasta una ley que habla de personas gestantes y el INE decidió solo recoger estos datos en “mujeres” sean cisgénero o transgénero. A estas últimas, aunque no tengan capacidad de gestar, igual les harán la pregunta. Increíble, ¿no?
Luego de una discusión política de años, logramos incorporar a adolescentes mayores de 14 años para que puedan rectificar su identidad civil y hacerla coherente con su identidad de género, aunque elles que ya han logrado conquistar su identidad, igual serán contabilizades como jóvenes cisgénero. El INE debe incorporarles, de manera responsable, como un grupo que vive en la invisibilidad y vulneración de sus derechos constantemente.
De todo el trabajo realizado, la única pregunta que nos da un poco de esperanza en los resultados, es la número 50, que permite a la personas identificarse como trans y que ofrecerá en definitiva el único dato fiable que podremos tener de este Censo en lo que respecta a población trans.
[Te puede interesar] Violencia de género, una cuestión de valor
Esperamos que los, las y les encuestadores estén capacidades, sean diligentes y entiendan todes qué preguntar en cualquier contexto que les toque hacerlo, y así no obviar dicha consulta por temor a hacer una pregunta “innecesaria”, o que las personas que reportan den la impresión de ser “cerradas” en este tipo de temáticas.